Xita Rubert y Cynthia Rimsky, ganadoras del premio Herralde de Novela
Justo 30 años después de que Carlos Perellón y Pedro Zarraluki compartieran podio y galardón, el premio Herralde de Novela ha vuelto a echar mano del ex aequo para reconocer no a ganador y finalista, sino a dos ganadoras: la chilena Cynthia Rimsky y la barcelonesa Xita Rubert.
Dos hemisferios y dos generaciones diferentes hermanadas gracias a ‘Clara y confusa’ y ‘Los hechos de Key Biscayne’, novelas con las que Rimsky y Rubert inscriben su nombre en el palmarés del premio que concede anualmente la editorial Anagrama y cuya 42ª edición se ha visto alterada por el temporal de lluvia que ha descargado sobre Barcelona este lunes.
«Son dos novelas muy excéntricas y a contracorriente», ha resumido la editora de Anagrama, Silvia Sesé. Las dos autoras se repartirán la dotación del premio y cada una recibirá 15.000 euros.
‘Los hechos de Key Biscayne’, la segunda novela de Xita Rubert (Barcelona, 1996) tras la exitosa ‘Mis días con los Kopp’ es, al mismo tiempo, «una novela de misterio y un libro sobre las ambivalencias del afecto y la memoria». Una narración «tierna, descacharrante y perturbadora» que sigue los pasos de una niña en tránsito a la edad adulta y fascinada por su padre en Key Biscayne, una la isla habitada por «niñas que no parecen serlo, lagartos, magnates, celebridades, mafiosos y familias muy poco convencionales».
«Es una novela de capas en la que lo más bello y lo más turbio quizá sea lo que esté pasando por debajo de la trama», ha explicado Rubert, para quien ‘Los hechos de Key Biscayne’ surge como «una sátira sobre las personas que viven al margen de la realidad, sobrevolándolo todo como si estuvieran flotando gracias a su posición económica y social».
En el centro de la novela, una figura paterna excéntrica y «un tanto ambigua» a la que Rubert da forma desde la mirada de los hijos. «Un enrarecido relato de deseos adolescentes procesados por una mente adulta», en palabras de Gonzalo Pontón Gijón, miembro de un jurado que completan Aldo García, Gonzalo Pontón Gijón, Marta Sanz, Juan Pablo Villalobos y Silvia Sesé.
De ‘Clara y confusa’, novela de Cynthia Rimsky (Santiago de Chile, 1962), el jurado ha destacado que se trata de «una comedia romántica de vanguardia» que ahonda en el misterio y la promesa que acompañan al amor y al arte. «El arte y el enamoramiento como experiencias que sintetizan la máxima claridad y la máxima confusión. Belleza, inteligencia y humor», en palabras de Marta Sanz.
En la novela, un fontanero se enamora de una artista llamada Clara y se embarca en una historia «de amor y dependencia con límites torturantes». «A caballo entre el oficio del amor y el amor al oficio, ‘Clara y confusa’ pone en pie un mundo de provincias tan extravagante como las tuberías de que se cuida su protagonista, fiel y sufrido enamorado de una artista conceptual que es una heroína de la negación, y no menos fiel integrante de un sindicato profesional plagado de conspiradores y de filósofos cínicos», señala, también desde el jurado, Pontón Gijón.