Tres mujeres reciben el reconocimiento ‘Meninas’ por su contribución a la lucha contra la violencia de género en Aragón

Tres mujeres reciben el reconocimiento ‘Meninas’ por su contribución a la lucha contra la violencia de género en Aragón




ZARAGOZA 22 Nov. (EUROPA PRESS) –

La Delegación del Gobierno de España en Aragón ha entregado sus reconocimientos ‘Meninas’ a tres mujeres, una de cada provincia, que han destacado en la lucha contra la violencia ejercida contra las mujeres en la comunidad autónoma, a la que es «esencial que todas las instituciones se sumen y contribuyan».

Así lo ha indicado el delegado del Gobierno en Aragón, Fernando Beltrán, en declaraciones a los medios de comunicación antes de presidir el acto de entrega de los reconocimientos. «Debemos seguir trabajando para incorporar ayuntamientos tan importantes como el de la ciudad de Zaragoza, donde se encuentran prácticamente la mitad de las víctimas», ha añadido.

En Aragón son 2.638 mujeres las que reciben protección en distintos grados y se ha logrado extender el convenio del Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén) a 17 ayuntamientos, lo que supone una vigilancia activa desde los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en colaboración con las policías locales.

Por otro lado, en España son 1.285 las mujeres que han sido asesinadas por sus parejas o exparejas desde 2003, año desde el que hay registros, 34 de ellas en Aragón. En lo que va de 2024, 40 mujeres han perdido la vida a manos de sus agresores y ocho menores han sido asesinados también por violencia de género –61 desde que hay registros–.

Beltrán ha recordado a la última víctima en la comunidad autónoma, asesinada por su expareja en Ejea de los Caballeros este verano.

Estas cifras, ha subrayado el delegado del Gobierno en Aragón, «deben ser un acicate para actuar», agregando que España es un referente internacional en la lucha para erradicar la violencia de género. «La aprobación de la Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, hace ahora 20 años, supuso un cambio de paradigma en nuestro ordenamiento jurídico y estableció una arquitectura institucional y jurídica para combatir la violencia de género que sigue consolidándose en nuestro país», ha recordado.

En este sentido, el Gobierno de España «no dará ni un paso atrás. O se está en la defensa de las víctimas de violencia de género o con los agresores. Sin escala de grises», ha remachado, a pesar de «posiciones de ultraderecha que se empeñan en negar que existe una violencia específica contra las mujeres».

TRES PREMIADAS

En el acto, enmarcado en la celebración del Día Internacional contra esta lacra, que se conmemora el 25 de noviembre, han sido galardonadas María Arrondo, pionera en trabajar sobre igualdad como concejala del primer ayuntamiento democrático de Zaragoza; Lucía Sánchez, matrona que desde Teruel trabaja en la prevención de la violencia contra la mujer con especial atención a las mujeres vulnerables; y Josselyn Quinto, quien intervino para proteger a una mujer de una agresión machista grave en Huesca.

María Arrondo entendió que la transversalidad o perspectiva de género debía impregnar todas las áreas de gestión municipal y, como concejala de Deportes, logró que en el año 1979 muchas mujeres saliesen a hacer ejercicio en las calles de Zaragoza.

Como concejala de Sanidad, creó en 1982 el centro de promoción de la salud y desde allí se atendieron los primeros casos de mujeres que se atrevieron a denunciar malos tratos. Así, Arrondo dio los primeros pasos para la creación de casas de acogida, así como de la Casa de la Mujer.

Este galardón, ha expresado María Arrondo, reconoce también «una parte muy importante de nuestra historia como es la Transición». De aquellos primeros ayuntamientos democráticos, a los que ha calificado de «escuelas de democracia», ha reconocido su impulso al desarrollo de los derechos «arrebatados por la dictadura» a los ciudadanos, especialmente a las mujeres.

«Hemos avanzado mucho en igualdad, pero queda mucho camino por recorrer», ha comentado Arrondo, que ha alertado de que «algo está fallando» cuando todavía hay mujeres que sufren violencia de género y no denuncian.

Ha instado a las instituciones públicas a reclamar junto a los colectivos sociales: «Ni una más». También a que desplieguen sus recursos para permitir la igualdad y la erradicación de la violencia de género, puesto que «solo así, podremos gritar y reclamar fuerte que basta ya».

LABOR «SILENCIADA»

La premiada de la provincia de Teruel, Lucía Sánchez, matrona que desarrolla su actividad en centros de salud, ha hecho de la prevención de las violencias uno de sus principales objetivos con especial atención a las mujeres que sufren o están en riesgo de sufrir mutilación genital femenina y en el apoyo a las mujeres migrantes y vulnerables para prevenir que sean víctimas de otros tipos de violencia o de explotación sexual.

Además, imparte charlas y talleres por toda la provincia con una perspectiva feminista. «Me emociona que reconozcan estas labores que hacemos tantas personas como yo para erradicar todo el tipo de violencia, sobre todo contra la mujer», ha manifestado Sánchez.

Ha contado que, en ocasiones, se solicita el asilo político para que las mujeres atendidas no sean deportadas a sus países de origen, algo que supondría para ellas «la muerte misma», ya que viven situaciones «desesperadas y suben a una patera porque no tienen otra opción». «Que se reconozca toda esta labor, aunque a veces está silenciada, me parece muy importante», ha apuntado Lucía Sánchez.

Por último, Josselyn Quinto ha relatado el episodio ocurrido este verano en el establecimiento hostelero en el que trabaja en Huesca, cuando, a la hora de cerrar, evitó lo que podría haber acabado siendo un feminicidio. «Lo único que me salió fue defenderla y ayudarla, ponerme en medio para que no le hiciera más daño», ha rememorado.

En caso de encontrarse en una situación similar, Quinto ha asegurado que volvería a actuar de la misma manera: «Defender a una mujer es lo mejor. Lo volvería a hacer». Ha pedido a la sociedad «actuar» ante episodios de violencia, en lugar de «quedarse mirando o grabar con los móviles; hay que intentar ayudar, ya sea un hombre o una mujer».

Fuente: www.europapress.es