Topuria y la revolución artística para que Barcelona no rechace a la UFC: «Quería darles un toque»

Poco tiempo más tarde de conocerse esa última información, la del portazo a la UFC por parte de Barcelona, el barrio del Born, en pleno centro de la capital catalana, amaneció con un mural de Ilia Topuria, lanzando un golpe de derecha. Un momento icónico, pues supuso el principio del fin de Holloway en el combate. Y se viralizó la instantánea. ABC MMA ha acudido al lugar de la escena, para conocer de primera mano el porqué del mural, que tiene un trasfondo revolucionario, contra el consistorio socialista.

«La labor de los artistas es contar la actualidad, lo que está ocurriendo. Se filtraron noticias de que el Ayuntamiento de Barcelona descarta un evento de la UFC aquí y quise poner a Ilia como reclamo a nivel político», señala el autor del mural, Alberto León, un artista urbano que lleva 13 años viviendo en la ciudad condal. «Soy de Tenerife, pero vivo en Barcelona. La idea inicial era hacerlo en Madrid, pero pensé que en Barcelona tendría mucha más repercusión a nivel mediático. Escogí esta esquina porque, después de estudiar varias en la zona, esta me pareció la más acertada, pasa muchísimo turismo por aquí y parece que está funcionando», cuenta el pintor.

Lo cierto es que, en la media hora que este periódico estuvo allí presente, numerosos curiosos se acercaron a fotografiarse con el mural y el artista. «Lo que quería era agitar un poco a la sociedad, la noticia seguramente le haya llegado al Ayuntamiento de Barcelona. No sé si con este mural voy a conseguir que se replanteen las cosas pero sí quería darles un pequeño toque para que vea que también tiene su público aquí, que hay muchísima gente que quiere a Ilia Topuria y que quieren verlo pelear en esta ciudad», cuenta León, quien ya ha realizado varios murales que buscan mover la conciencia ciudadana, y lo ha compartido en su cuenta de Instagram.

«Es una revolución contra el Ayuntamiento de Barcelona, Barcelona tiene su público, hay mucha gente que se siente representada por Ilia a pesar de que le estén cerrando las puertas. Es un puñetazo a todos los que critican este deporte y que están cerrando las puertas a este deportista que está representando a nuestro país y llevando el deporte a otro nivel», expone León, quien señala que «estaría encantado de la vida» de que la UFC llegara a Barcelona. «Me parece un deporte que desprende muchos valores, que representa Ilia a la perfección, el respeto, la honestidad, la disciplina, la entrega, la lucha. Me parece un símbolo y me considero un fan de Ilia Topuria», señala.

Un arte «efímero» e «ilegal» para despertar conciencias

Este artista urbano, gran aficionado a las artes marciales mixtas, sabía del potencial de Topuria para defender con éxito su título de la UFC. Pero faltaba comprobar el desarrollo del combate. Hasta que vio el golpe que mejor le cuadraba. «Estéticamente lo mejor era escoger la imagen de su golpe de derecha para que cuadrase con el muro. Orienté también las piernas para que estuvieran a ras de suelo y tuviera una posición completamente de perfil. Al final estudié el movimiento del cuerpo y lo puse a tamaño real para que la gente se divierta y se sorprenda al mismo tiempo», cuenta.

«Fue cuestión de días. Sabía que Ilia iba a ganar, él ya había ganado antes de empezar la pelea. Quería hacer algo sobre él. A partir de la noticia en la que Dana White dejaba la puerta abierta a Barcelona para que la UFC aterrizase en España y el ayuntamiento lo rechazase pensé que había que hacer algo. Lo quise contar así: poniendo su figura en el centro de Barcelona», continúa relatando el artista urbano, que señala que la intervención busca que el transeúnte interactúe con el mural.

En cuanto a la gran repercusión que ha tenido, León reconoce que nunca puede imaginar la viralidad que tendrá, pero la noticia «ha ido muy rápido». «Sobre todo quiero agradecer a todos los profesores de artes marciales que hacen una labor tremenda y para nada es un deporte violento como se está contando aquí en Barcelona. Aquí está a la orden del día lo que todos sabemos: peleas, hurtos y este tipo de delitos y las artes marciales es justo lo contrario a eso», asegura el artista.

«El arte urbano es efímero, puede durar un mes, dos meses, un año… Al final es responsabilidad del ciudadano, pero la vida suele ser corta de un obra así, no le doy más de dos semanas. Es un trabajo de ilustración, diseño gráfico y fotografía. Hice todo el proceso creativo en casa para hacer la intervención lo más rápido posible. Piensen que este arte urbano es ilegal y hay que actuar rápido. Había que estudiar bien las proporciones y hacer un trabajo previo de muchas horas», desgrana el pintor.

Eso sí, la aceptación del lugar donde ha establecido el mural ha sido máxima, convirtiéndose en un punto turístico de la ciudad. Así lo asegura Verónica, la dueña del local anexo, Spa Ponlo Xulo, una peluquería canina. «Me encanta, atrae a mucha gente, crea mucha expectación y nos llena la calle y el barrio de alegría. Estamos dentro del negocio y nos piden que les hagamos fotos. No conocía la UFC ni a Ilia Topuria hasta que Alberto hizo el mural», cuenta la propietaria.

El pueblo da el ‘sí, quiero’

Por otro lado, el debate del portazo del Ayuntamiento de Barcelona a la UFC ha llegado a las calles. Aunque la realidad es que, de las personas consultadas por ABC MMA, no todos tienen una opinión formada o conocen la compañía que dirige Dana White, muchos residentes en la ciudad condal están de acuerdo con su hipotético aterrizaje. «Que el Ayuntamiento de Barcelona rechace a la UFC es una vergüenza absoluta y lo digo como practicante de artes marciales, barcelonés y catalán. Por supuesto que quiero la UFC en Barcelona y la filosofía de Ilia Topuria o Abner Lloveras aquí. Las artes marciales son educación», señala Eduardo, un treintañero que practica estas disciplinas.

«La llegada de UFC a Barcelona solo aportaría beneficios, algo que necesitamos. Ahora está siendo el ‘boom’ de las artes marciales y los deportes de contacto. Tenemos a campeones como Sandor Martín en boxeo que los barceloneses ni conocen. Y además dejaría beneficios económicos, seguro que mucho mejor que con las regatas…», dice respecto a la organización de la Copa América de vela, que fue un fiasco para el consistorio.

Una idea que comparte Ángel López, experto en ‘coaching’ y desarrollo personal. «Me parece una decisión que no ha sido meditada, más bien reactiva, porque a día de hoy no solo las MMA se han convertido en un deporte emergente sino que probablemente se conviertan en el segundo deporte en afición en España. Financieramente en Barcelona se suele ser inteligente pero esta vez no lo están haciendo bien», apunta el empresario.

«En el estadio que hagan el evento va a ver llenazo seguro, hay muchas ganas, hay una oleada, el efecto Topuria va a atraer a mucha gente de muchos lugares y eso supondría a la ciudad condal unos ingresos que no se han tenido en cuenta. Se ha tomado la decisión desde el ego y posiblemente heridos por el madridismo que entraña Topuria y muy poco inteligente a nivel económico. A mí sí me gustaría que la UFC viniera a Barcelona y además me parece que es muy buen destino, el Palau Sant Jordi sería un recinto muy bueno, seríamos muchos los que iríamos», cuenta López.

Que además aporta una visión más allá del hiperlocalismo. «Traer la UFC a Barcelona generaría un antecedente. El desplazamiento de todo su colectivo y todos los aficionados es poner Barcelona en el mapa como uno de los ‘rockstar’ más grandes a nivel mundial. Serían beneficios a nivel autoridad como ciudad referente en las artes marciales mixtas en España y por qué no competir con las ciudades inglesas o París. Es un negocio a largo plazo», cuenta este barcelonés.

Una visión que comparte Óliver, también implicado en el desarollo del sector en la ciudad condal. «Traer a la UFC aquí pondría a Barcelona en el mapa de las MMA, lo cual puede dar un impulso importante al deporte en la ciudad. Ayudaría a quitar prejuicios y abriría las puertas para que más gente descubra la riqueza de las artes marciales, que no es solo pelear, sino una forma de vida basada en el respeto, la autodisciplina y el control. Además, atraeríamos turismo deportivo, lo que beneficia a la economía de la ciudad», cuenta.

Mario, otro joven barcelonés, cree que «como modelo de eventos deportivos», la UFC tiene «un gran poder de convocatoria, y traerla a Barcelona seguramente generaría un interés masivo». «Personalmente, creo que podría ser emocionante, sobre todo para la comunidad de seguidores de deportes de combate en España, que es cada vez mayor. Además, Barcelona ya acoge una amplia variedad de eventos deportivos, y la UFC podría añadir un nuevo tipo de espectáculo», señala.

Aunque, eso sí, es consciente de que «hay opiniones opuestas sobre la UFC». «Algunos la adoran por la habilidad y disciplina que requiere, siguen de cerca a peleadores como Ilia Topuria y se emocionarían si la UFC viniera a Barcelona. En cambio, otros ven la UFC como demasiado violenta y creen que no encajaría con la imagen de la ciudad, preocupados por la cultura que puede promover», concluye Mario.