si éstos indicaran otra tendencia, España tomaría medidas

si éstos indicaran otra tendencia, España tomaría medidas




   MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) –

   Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) han defendido que la toma de decisiones sobre la regulación del lobo debe basarse en el conocimiento y en la ciencia. «Si los datos contrastados y las evidencias científicas indicaran una tendencia diferente, España tomaría las medidas que en ese caso correspondieran», han señalado a los medios.

   Así se han expresado después de que la Unión Europea (UE) haya logrado este martes que se rebaje el estatus de protección internacional del lobo después de que el Comité Permanente del Convenio de Berna haya votado a favor de su propuesta para relajar las normas de gestión de esta especie.

   Esta modificación supone pasar de la categoría de «protección estricta» a la de simple «protección» dentro del Convenio de Berna del Consejo de Europa, establecido en 1979 y que suscriben 50 miembros (incluidos los 27 países de la UE).

   El cambio entrará en vigor el 7 de marzo de 2025 y, después de esa fecha, la Comisión Europea podrá plantear una revisión de las reglas comunitarias de la directiva de hábitats, que afecta a la gestión de las poblaciones de lobo que deberá ser aprobada por el Parlamento Europeo y los Veintisiete.

   Tal y como detallan las fuentes, este cambio legislativo dará mayor flexibilidad a los Estados miembros a la hora de gestionar sus poblaciones de lobos, que deben seguir a su vez atendiendo a su propio marco normativo y de gestión. Al mismo tiempo, dado que el lobo seguirá siendo una especie protegida, las medidas de conservación y gestión de los Estados miembros deberán mantener sus poblaciones en un estado de conservación favorable.

   En este aspecto, inciden en que es importante hacer un seguimiento detallado del estado de las poblaciones desde el punto de vista de la investigación, de manera que se pueda determinar su evolución y si se encuentran en un estado de conservación favorable. A tal efecto, consideran que es necesario estandarizar y homogeneizar las técnicas de censo, para que puedan ser comparables entre distintos territorios europeos.

   En paralelo, las fuentes indican que se deberá profundizar en la coexistencia entre el lobo y la ganadería, adoptando las medidas necesarias de prevención de daños para reducir la depredación del ganado. Además, reconocen que los ganaderos deben ser ayudados y acompañados en el proceso de aplicar estas medidas preventivas, lo que incluye la formación necesaria para poder aplicarlas.

   Según detallan, las medidas recomendadas incluyen perros de guarda, cerramientos eléctricos y cerramientos convencionales, y también nuevas tecnologías. De igual manera, señalan que se seguirá promoviendo la adopción de medidas indemnizatorias por los daños que pueda ocasionar el lobo, como medida paliativa.

   Por último, recalcan que la Comisión seguirá ayudando a los Estados miembro y a las partes interesadas en el diseño y la aplicación de medidas de conservación, a través de la financiación y otras formas de apoyo. En su opinión, hay que utilizar las oportunidades que ofrece la Política Agraria Común (PAC) y otros instrumentos económicos de la UE para financiar la coexistencia.

Fuente: www.europapress.es