Rocha y la maldición de las moquetas
El segundo palo
«¿Qué irresistible perfume desprenderán para atrapar de ese modo a un hombre que, como don Pedro, carecía de afán de protagonismo y no quería otra cosa que retirarse a su Santa Elena?»
Pedro Rocha pasará a la historia como el hombre menos apegado al cargo más apegado al cargo de la historia. Eso oí de él cuando era un desconocido y acababa de ser elegido por Luis Rubiales para que le calentara la poltrona y no se …
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