«No tiene nada que hacer»

– Ilia ya queda muy poco tiempo para que entres al octógono. ¿Qué versión vamos a encontrar de ti en relación a la que vimos cuando ganaste el cinturón ante Alexander Volkanovski? ¿Qué has mejorado?

– En cada combate que tengo, adquiero nuevas habilidades, nuevas técnicas, intento implementar cosas nuevas, siempre he demostrado que voy mejorando y en esta ocasión no será diferente. Se me va a ver mucho más profesional que la última vez. No voy a tener que demostrar mi paciencia porque el combate acabará mucho antes de lo que muchos piensan. Van a ver una versión muy agresiva de Ilia.

– Has retado a Holloway a intercambiar desde el principio. ¿Cómo de atentos vamos a tener que estar a los diez primeros segundos del combate?

– Superatentos, si él se planta en el medio del octógono, van a ver los diez segundos más interesantes de la historia de la UFC y las artes marciales mixtas. Van a ser explosivos.

– ¿Qué situación te ha generado más presión ganar el cinturón o defenderlo?

– Ninguna de las dos, la verdad, yo lo disfruto. Yo no puedo sentir presión, la única presión es la del recorte de peso. A mí me divierte el hecho de pelear, que esté todo el mundo apoyándome, compartiendo mi experiencia. Antiguamente la gente iba a la guerra y no sabía si iba a volver a casa, yo no tengo ninguno de esos miedos. Voy a entrar y hacer lo más me gusta. Voy a pelear contra Max Holloway, un tipo que no es conocido por hacer mucho daño, no tiene poder de KO, para mí era mucho más peligroso estar durante 25 minutos delante de Josh Emmett, que no sabías con qué mano te podía apagar las luces. Tenía ese poder. En cambio, con Max no siento eso, es un peleador de mucho volumen, que suele cansar a los oponentes, pero ese no va a ser mi caso. No estoy preparado para pelear 5 asaltos, estoy preparado para pelear 10, 15 o 20 si quiere.

– Lo que sí ha cambiado respecto a su pelea contra Volkanovski es el lugar donde te hospedas. Ya no es el hotel de los peleadores, habéis alquilado una gran casa.

– Así es, estamos en nuestra casa todos concentrados, muchísimo más cómodos, con las experiencias que he ido adquiriendo así es como mejor me funciona.

– Ilia, ¿si ganas el pleito, algún nombre en el que hayas pensado ya para que sea el siguiente combate? Se te han abierto muchos frentes.

– Ya gané, Álvaro, ya gané. No es si gano, la victoria ya es mía. Las medallas se ganan en el entrenamiento, en la competición uno va a recogerlas. Yo voy a recoger lo que es mío este sábado. Antes solía dar más nombres, pero me he dado cuenta que no funciona así, puedo hablarte con mucha seguridad sobre mí, pero no sé cómo se van a desarrollar las circunstancias en las divisiones. Con quien me diga la UFC que me tengo que enfrentar, ahí estaré yo.

– Lo que está sorprendiendo en España es la percepción que tienen del combate en Estados Unidos y en el resto del mundo. De 24 luchadores de UFC consultados, 20 opinan que el favorito es Max Holloway. ¿Es algo que te motiva?

– Nunca me importó, nunca me dieron como favorito, siempre fui la novedad. En España, al principio, cuando decía que iba a llegar a la UFC, decían que era un flipado. Ya la gente lo ha podido creer. Ahora está pasando lo mismo pero en el resto del mundo. Decían cómo le va a ganar a Volkanovski y voy y le gano. Y ahora con Holloway, no se dan cuenta que es mucho más fácil aún. No tiene nada qué hacer, está jodido.

– Hablemos de Conor McGregor, que sigue haciendo referencias a ti de manera pública. Lo último que dijo es que era un cachorrito. ¿Qué opinas al respecto?

– Yo el apodo que le pongo a él es que es un ‘fake fighter’, siempre finge pelear. Dustin Poirier lo ha machacado, Nate Díaz le ganó dos veces, Khabib lo humilló, Floyd Mayweather con 50 años le dio una ‘masterclass’ de boxeo. ¿Y él me pone apodos a mí? Yo estoy invicto, qué está hablando. A él lo han machacado en todas las divisiones. Que se calle y haga su trabajo de promotor. Intenta subirse al barco para mantenerse en la conversación, pero está acabado. Tiene que aceptar el momento en el que está desapareciendo del deporte. Si hubiera tenido una personalidad amable, la gente tendría una percepción diferente hacia él. Cómo él actuó con todos le viene a su favor. Es un idiota, está mal de la cabeza.

– Si todo sigue su curso, mantienes tu cinturón, subes al peso inmediatamente por encima, el ligero, y ganas, podrías terminar intentando una hipotética triple corona de la UFC en el wélter. Allí está Belal Muhammad, con quien has tenido ya algún pique.

– Si Belal sigue como campeón, sería un paseo para mí, subir y ganar el título de peso wélter. Es un paquete, es malísimo. Es un campeón que no ha finalizado a nadie, no ha tenido ni un ‘knockdown’. Esta mañana me desperté y dijo si le veo le voy a dar un guantazo, tienen una actitud de gánsters y son unos payasos. El que de verdad es capaz de hacer algo no te lo dicen. Ellos ladran y ladran.

– Mucha suerte este sábado. España está pendiente. 

– Vamos a recoger una victoria más. La victoria es nuestra.