Marvel, o cómo los frikis conquistaron el mundo
El arco narrativo de los 85 años de historia de Marvel contempla sus propios multiversos. De ser un oscuro objeto de deseo de adolescentes marginales (o eso reza el cliché) a cambiar la industria del cine , no sabemos si para bien, con sus franquicias y sagas sempiternas de superhéroes que no dejan salas al resto de películas, tal es su éxito y rodillo. Ahora una exposición en Ifema (Madrid), con más de 200 piezas únicas y originales, cuenta su historia, un viaje para comprender también el siglo XX y XXI. Para toda la familia, desde este viernes, por sólo 16,90 euros los adultos.En 1939, en una pequeña editorial de la Calle 42, en Nueva York, Martin Goodman creó Timely Comics . Los tebeos de superhéroes, hijos de las tiras de viñetas y las ilustraciones de las novelas pulp, estaban de moda, y, junto a un reducido equipo de creativos, este editor lanzó ‘Marvel Cómics #1’, con arte de Frank R. Paul . Ahí debutó Antorcha Humana y Namor el Hombre Submarino . Y, ya saben, luego vendrían Thor, Los 4 Fantásticos, Daredevil, la Patrulla X… y si el fútbol tiene a la Masía, los superhéroes tendrían a Marvel. Y a Florentino Pérez como Magneto . O Superman, si lo prefieren. Desde 2018 por el mundo, sobre todo en Estados Unidos y Canadá, esta exposición creada por Semmel Exhibitions muestra en España bocetos primigenios de tus superhéroes favoritos, espectaculares vestidos por los que han ganado hasta algún Oscar en vestuario y juegos inmersivos para los más pequeños (y para todos) con los que divulgar las andanzas de autores como Stan Lee o Jack Kirby , y reconocer de paso que en sus historias están las fábulas y cuentos modernos, donde transmitir también valores, ideología y otros productos de mercado.¿Saben que Marvel creó Capitán América un año antes de que Estados Unidos entrara en acción en la Segunda Guerra Mundial, un superhéroe antifascista? «A lo largo de estos más de 80 años, sus personajes han evolucionado en muchos aspectos como la sociedad. En temas de género, de salud mental… porque, al final, también hablan de nuestra vulnerabilidad», dice Juan Sanguino, moderador de la presentación y periodista cinematográfico. «El heroísmo, la generosidad o la bondad son los valores de Marvel», suma Patrick Reed , comisario de la exposición, pero que, sobre todo, subraya «el valor de la creatividad. Porque todos estos personajes fueron creados por unas personas». Y entre ellas un genio, Stan Lee, cuyo nombre real era Stanley Martin Lieber, pero que utilizó el pseudónimo que le haría eterno para proteger su futuro como novelista serio. Qué guasón es el destino. Cuando entró en Timely Cómics con 17 años, luego Marvel bajo su mando, borraba el trazo a lápiz de las páginas entintadas y se encargaba del café. Acabaría de editor durante tres décadas. Y colaboró con esta exposición y hasta escribió el prólogo de la misma. Fue lo último que escribió, pues falleció el 12 de noviembre de 2018.Arriba la armadura de Iron Man para las películas, abajo un boceto de Lobezno y a la derecha una escultura de Hulk que se pueden ver en la exposición ‘Marvel: Universe of Superheroes’ Sold OutAntes de su puñetazo creativo en la mesa, el negocio del cómic lucía ruinoso y el editor Goodman redujo en un 80% su plantilla. Sí mantuvo una pequeña empresa dirigida por Lee, también desanimado y que apostaba por dejarlo Pero su mujer le dijo que una última vez. Y para este ‘last dance’, el guionista reclutó a Jack Kirby y, en noviembre de 1961, se publicó el primer número de Los Cuatro Fantásticos , que dotó al medio de un nuevo nivel de realismo: los superhéroes discutían, se reconciliaban… Nunca habían parecido tan reales (y disfuncionales). Y en solo dos años, la pareja nos trajo a Hulk, Thor, Iron Man, La Patrulla X, El Hombre Hormiga … De hecho, Kirby no dio abasto, pero Lee seguía de duende (verde) y contrató a Steve Ditko para crear a un adolescente solitario, que sufre acoso, preocupado por su tía May… Efectivamente, Spiderman. Efectivamente, personas con problemas. Así nacía Marvel, tras ser antes Atlas y Timely Comics.¿Son arte los tebeos? «Estamos llegando a ese punto, pero en el siglo XX todo el arte popular era entretenimiento. El pop, los cómics… son formas de arte con una energía y vitalidad que se identificaba con muchas generaciones. Pero tenían que entretener y se hacían muy rápido, uno al mes». Y como también le ocurriera a los videojuegos o el rol, antes fueron los cómics quienes estuvieron en la diana de la sociedad. En 1954, fueron sometidos a juicio ante el Subcomité de Delincuencia Juvenil del Senado, en Estados Unidos. Y el proceso no fue bien: el testimonio de Fredric Wertham fue contundente en un clima de pánico entre los padres porque los niños no aprendieran a leer «libros de verdad». ¿Y qué dijo este psiquiatra? Que los niños se veían muy afectados por la sociedad que les rodeaba. Y que la exposición a imágenes violentas les incitaba a ser violentos. Wertham no era conservador, sino progresista. Luchó contra la segregación racial porque mermaba la capacidad de aprendizaje de los niños. Y con los tebeos, acabó reculando décadas después, pero personificó al villano y fue parodiado por autores como Daniel Clowes .La dominación del cineY, al fin, el emporio cinematográfico. Y otra fecha clave, el 2 de mayo de 2008 con el estreno mundial de ‘Iron Man’, la primera entrega del universo cinematográfico de Marvel. Y de ahí hasta los 20 tráilers que ha necesitado la logística de esta exposición y que haya esculturas gigantes espolvoreadas por lugares icónicos de Madrid, como un escudo del Capitán América de dos metros en Cibeles. Y que Inmaculada Sánchez-Cervera, de la Alcaldía de Madrid, afirme en rueda de prensa que «en la vida de todo el mundo hay algo de Marvel» y reconozca que le dio rabia que Spiderman eligiera Venecia en vez de nuestra capital. «Madrid es un plató brutal». Y dos reflexiones de postre: «Se ha pasado de los cómics al fenómeno de masas. Es un hito en la historia del cine que ha cambiado el modelo de negocio. A la Generación Z le extraña cuando una película empieza y acaba, y esto tiene que entenderse», dice Sanguino. Unas sagas y franquicias episódicas que han contado con un ‘malo’ de lujo: Martin Scorsese , que llegó a afirmar que « las películas de Marvel no son cine, son parques temáticos ». Luego, en ‘The New York Times’, argumentó: «Ahora hay dos campos separados: entretenimiento audiovisual y cine. Y me temo que el dominio financiero de uno se usa para marginar y menospreciar al otro. Ahora las películas se hacen tras una investigación de mercado, pruebas con audiencia, examinadas, modificadas, revisadas y remodificadas hasta que estén listas para el consumo. Para mí, para los cineastas a los que llegué a amar y respetar, el cine se trataba de revelación: estética, emocional y espiritual».