Mañueco fía aprobar unas Cuentas «récord» a la «mente abierta» de la oposición

Mañueco fía aprobar unas Cuentas «récord» a la «mente abierta» de la oposición




No es una cuestión de peajes o exigencias. Es una cuestión de altura de miras», de «ser capaces de dejar líneas rojas y posturas irrenunciables» y sentarse a negociar «con una mente abierta para poder llegar a un acuerdo». Son las palabras con las que el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, llamó ayer a los grupos de la oposición a abordar la negociación de los presupuestos de la Comunidad para 2025.

Su anteproyecto lo aprobó el Consejo de Gobierno en sesión extraordinaria, elevando las cifras hasta el «récord» de los 15.084 millones de euros, un 3,58 por ciento más que los que están en vigor. Y es que ese cuadrante de números y proyectos estampados en lo que Mañueco definió como «unos buenos presupuestos para Castilla y León y para las personas» de aquí, son en realidad sólo la mitad del sustento sobre el que se levantan.

Y es que para que los primeros Presupuestos con sello únicamente del PP desde que Mañueco asumió la Presidencia hace algo más de cinco años se hagan realidad deben tener el apoyo de una mayoría de las Cortes con la que no cuentan desde que Vox se salió del Gobierno de coalición el pasado julio. Así que a negociar toca «con todas las fuerzas políticas» y la intención que comenzar las conversaciones con el PSOE, el principal partido de la oposición, avanzó el presidente de la Junta. También con quien antes fueron socios, aunque Mañueco ya avanzó que puede «intuir» en qué dirección se pronunciarán los de Juan García-Gallardo, presuponiendo que toparán con su rechazo. «Pido a los grupos que piensen en las personas de Castilla y león, que no piensen ni en ellos ni en las personas que están fuera de Castilla y León», ya había reclamado previamente en clara alusión a socialistas y formación derechista, los únicos que tienen en su mano y en sus votos la aprobación.

La primera prueba, de hecho, llegará antes, pues para poder abordar los Presupuestos primero tiene que salir adelante el techo de gasto no financiero, al que ayer también dio luz verde la Junta -13.490,5 millones, un 3,82 más alto- y hoy registrará el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, en las Cortes para arrancar esas negociaciones. Si no prospera, «volveríamos a iniciar proceso de diálogo con las formaciones políticas», apuntó. Y reiteró que su «intención» sigue siendo «agotar la legislatura», cuyo fin «en cualquier caso no va a estar condicionada a la aprobación de los presupuestos», algo que pone en duda buena parte de la oposición.Sociales, vivienda…«Hemos diseñado unas buenas Cuentas», que «merecen ser respaldadas», reiteró el jefe del Ejecutivo en su apelar a la «responsabilidad» y «altura de miras» a las bancadas de enfrente.

Las «más altas de la historia» de la Comunidad, esbozadas en la fecha tope que marca el Estatuto de Autonomía y diseñadas para «afrontar los desafíos del futuro de Castilla y León y seguir gestionando el presente», esgrimió el presidente, quien incidió en que sitúan «a las personas como centro de los servicios públicos». Confeccionadas, aseguró, «pensando» en la «protección» de los ciudadanos y «mejorar» su atención. Como prueba, dijo, que 9.879 millones de euros van destinados a política social, «ocho de cada diez euros», siendo Sanidad la cartera que más acapara, hasta superar «por primera vez» los 5.000 millones de euros. Y también «con un impulso» a las políticas de conciliación y vivienda, «tan importantes en el momento actual», sostuvo con un claro mensaje dirigido al Ejecutivo central. «Queremos desarrollar una política de vivienda seria, coherente, modélica y, sobre todo, que contraponga esta seriedad que nos caracteriza frente a los exabruptos y la imposición del Gobierno de España». «Lo que necesitamos es más financiación y menos políticas de ataque», espetó. Detalló que precisamente a este campo están destinados 206 millones de euros, además de 38 millones en beneficios fiscales.

Dentro de su «política fiscal, moderada, inteligente y a la vez comprometida, mientras otros apuestan por freírnos a impuestos», defendió Mañueco, se incluyen cuatro nuevas rebajas tributarias. Especialmente pensadas, aseveró, «para las familias, los jóvenes, los autónomos y el medio rural», con un ahorro en impuestos cifrado en 709 millones, que «beneficiarán» a unos 560.000 contribuyentes. Más en el caso de la bajada del tipo mínimo autonómico del IRPF del 9 al 8,5 por ciento, que repercutirá en 1,37 millones de declaraciones de la Renta. «Tenemos la fiscalidad más baja de nuestra historia», presumió Mañueco, quien avanzó que además han diseñado un tipo «superreducido» del tres por ciento en el del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales en el caso de las ciudades «para facilitar el acceso a la vivienda a jóvenes» y del 0,01, en el de los pueblos.

Además, también subirá del 15 al 20 por ciento la deducción en Impuesto de la Renta cuando se rehabilite una vivienda para alquilar en el medio rural y «ampliar» los supuestos de bonificación del 99 por ciento en el tributo de Sucesiones y Donaciones de explotaciones agrarias.

Y eso a la vez que en las Cuentas prevén un incremento del seis por ciento en los ingresos por impuestos directos (3.636,9 millones) y de un 1,49 en los indirectos (3,989,3) «Es plenamente compatible el bajar impuestos con más personas trabajando y que la recaudación pueda aumentar», argumentó Fernández Carriedo.

Un 9,4% más en Agricultura

La «moderación» tributaria «permite el incentivo del consumo, el incremento de la inversión», sostuvo el presidente en la presentación de un anteproyecto de Presupuestos -figura nunca vista hasta ahora y arbitrada así hasta que el techo de gasto salga adelante- que «apuestan con la inversión productiva y sostenible, que sirva de palanca de transformación económica y social». Entre otras partidas, 2.410 millones en inversiones y 2.536 para políticas de lucha ante el reto demográfico. Y el sector primario como «fundamental» en Castilla y León, situando a Agricultura como la Consejería que «más crece», casi un 9,4 por ciento, hasta los 1.584 millones, incluyendo la PAC.

Es, resumió Mañueco, «un buen instrumento» para empezar el diálogo con las distintas formaciones». Un cuadrante a día de hoy con pocas garantías de salir adelante en el que se recogen «los anhelos, propuestas, reivindicaciones» recibidas en los encuentros mantenidos con distintos colectivos. «Estamos construyendo una Castilla y León atractiva para las familias, los jóvenes, donde se pueda disfrutar de una alta calidad de vida. No sólo vivimos muy bien, sino mucho», sostuvo Mañueco en esa llamada a la «responsabilidad» que deja la pelota en el tejado de la oposición.

Fuente: www.abc.es