Lecciones prácticas de empleabilidad y crecimiento profesional
Con el propósito de integrar a los estudiantes en el mercado laboral desde el primer día de su formación universitaria, las Universidades CEU han lanzado un ambicioso programa diseñado para preparar a los estudiantes no solo en el ámbito académico, sino también en el conocimiento práctico del mercado laboral y en las demandas específicas del mundo empresarial en un entorno profesional cada vez más exigente y competitivo.
Desde la Comisión de Empresabilidad, compuesta por BBVA, Mapfre, Ilunion, Vodafone, Garrigues, GSK, Airbus y Randstad, el CEU ofrece a sus alumnos el programa ‘Diseña TU Futuro-Programa de Aceleración de la Empleabilidad’. Un plan que responde a la necesidad de adaptar la formación universitaria a la realidad profesional, estableciendo puentes entre las aulas y las empresas, con el fin de que los estudiantes no solo acumulen conocimientos teóricos, sino que también adquieran competencias prácticas que los posicionen de manera más competitiva una vez finalicen sus estudios.
Según Carmen Sebrango, directora de Carreras Profesionales de la Universidad, la tasa de desempleo entre los titulados superiores en España sigue siendo preocupante, pero el CEU aspira a que sus graduados no formen parte de esas estadísticas. La empleabilidad se ha convertido en una prioridad estratégica, y con este nuevo programa, se da un paso firme hacia un acompañamiento continuo desde el primer día de universidad hasta la inserción en el mercado laboral.
En el informe ‘Jóvenes universitarios y empleabilidad’, elaborado conjuntamente por el centro de estudios de Randstad y la Fundación Universitaria San Pablo CEU, ya se alerta sobre los desequilibrios entre lo que demandan las empresas y la formación de los jóvenes y se destaca la importancia de elegir unos estudios que se correspondan con las necesidades de talento de las empresas.
Tasa de paro
Este estudio revela también que la situación laboral y formativa de los jóvenes en nuestro país es diferente que en el resto de Europa. La proporción de jóvenes activos con alta cualificación se sitúa en un 54,4% del total, mientras que la media europea es del 43,4%. Sin embargo, la tasa de paro para este segmento es el 14% en nuestro país frente al 6,5% de media europea. Además, tan solo el 23,4% de los jóvenes en nuestro país cuentan con un nivel de cualificación media -entre los que se incluyen los estudios de FP, muy cotizados en la actualidad-, mientras que en la UE la proporción es de un 45,2%. En ambos casos, la explicación puede ser tan sencilla como que la formación con la que cuentan los jóvenes no se ajusta a las necesidades de las empresas.
‘Jóvenes universitarios y empleabilidad’ insiste en la importancia de los estudios superiores a la hora de encontrar un empleo, aunque recordando la importancia de la elección. Cinco años después de graduarse, cerca de un 90% de los egresados universitarios están trabajando, sin embargo, existen grandes diferencias según la titulación académica.
Pensado para ser accesible desde el primer año de carrera, el programa se ha organizado en torno a cuatro bloques que serán distribuidos a lo largo de los cursos que estudian sus alumnos. El programa comienza tratando las habilidades interpersonales y las ‘soft skills’, es decir, prevaleciendo el contenido de carácter más personal; para posteriormente centrarse en el mundo profesional mediante el acercamiento a las entidades empleadoras, acelerando el criterio de los propios estudiantes a la hora de elegir su destino profesional. Una metodología mixta -presencial y virtual- que consta de 200 horas de formación con un enfoque práctico y atractivo para el alumno de cara a establecer los tiempos de carga lectiva. De hecho, durante la segunda fase del programa, el objetivo es incluir esta formación en los propios planes de estudio de cada grado, vinculando los módulos del programa con las asignaturas para adaptarlo a las particularidades de cada titulación.
Otro aspecto fundamental de este plan es su flexibilidad, es que se adaptará a las particularidades de cada titulación y se integrará en los planes de estudio, vinculando los módulos formativos con las asignaturas específicas de cada grado. Para apoyar a los estudiantes durante el proceso, cada uno de ellos contará con un mentor, con el que trabajará en el desarrollo de su identidad digital, potenciando su presencia en portales de empleo y redes sociales profesionales como LinkedIn.
Competencias personales
Las competencias personales son el factor diferencial en los procesos de captación de talento, más allá de los conocimientos técnicos con los que los jóvenes llegan al mundo laboral. La adaptación al cambio, la comunicación, el pensamiento crítico y creativo, la actitud resolutiva y la motivación por aprender son las cualidades más identificadas y valoradas. La Universidad debe fomentar el desarrollo de estas competencias y formas de trabajar, e inculcarle las ganas por seguir aprendiendo.
Por eso, las Humanidades son un vector transversal que impregna todas las titulaciones que se ofrecen. Son esenciales para aspectos como la creatividad, en saberes científicos y técnicos, en la comunicación o la empatía para gestionar equipos y para entenderse a uno mismo.
Otro aspecto en el que las Universidades CEU son pioneras es en el desarrollo y la certificación de las competencias de sus estudiantes con un modelo propio de competencias certificadas mediante microcredenciales con la tecnología Open Badge. Se certifican las competencias de comunicación, trabajo en equipo, innovación, autoconocimiento, crecimiento personal, liderazgo, emprendimiento, compromiso social y competencias transformadoras.
Sin olvidar los programas de mentorización que ofrecen los centros. Unas iniciativas de acompañamiento a los estudiantes en su desarrollo personal y profesional durante sus años de formación universitaria. Profesores, estudiantes de cursos superiores o profesionales en activo que acompañan y asesoran a los alumnos a lo largo de sus estudios y en sus primeros años de ejercicio laboral con la vista puesta en su desarrollo y en el salto al mundo profesional.
La FP gana puestos en la inserción laboral
Según un estudio realizado por la Fundación Universitaria San Pablo CEU en colaboración con Randstad, la Formación Profesional (FP) está ganando un peso creciente entre los estudiantes, gracias a los positivos resultados en términos de empleabilidad. Este informe revela que la tasa de empleo de quienes han cursado estudios de FP alcanza el 73%, superando en cinco puntos a la media general de empleo. Estos datos subrayan también que, tanto para los titulados en Grado Medio como en Grado Superior, las cifras de inserción laboral y de desempleo son notablemente mejores en comparación con el promedio de su franja de edad.
Esto es debido a que la FP refleja una mayor alineación entre los perfiles formativos y las exigencias del mercado laboral, lo que impulsa su valoración como una vía eficaz para acceder rápidamente a empleos de calidad y cubrir las necesidades de distintos sectores en expansión. En palabras de Javier Tello, director general de la Fundación Universitaria, «la FP se trata de una opción que permite a los jóvenes desarrollar su proyecto vital en un área donde la empleabilidad es alta y ofrece una visión pragmática y útil. En la Fernando III de Sevilla, de hecho, el campus está integrado porque somos conscientes de que debemos caminar hacia una FP más profesionalizada y a la altura de otros países; lo que necesitan nuestros jóvenes». En esta misma línea, Valentín Bote, director de Randstad Research, sostiene que «la formación es clave en la empleabilidad ya que la mayor parte de los puestos de trabajo requieren profesionales con elevados niveles de formación».
Tres de cada cuatro titulados en un FP de Grado Medio se sienten satisfechos con la formación recibida; uno de cada cuatro muy satisfecho y dos de cada cuatro bastante satisfecho. En el caso de la FP Superior, un 64,6% considera que sus estudios le han servido para encontrar trabajo, frente al 35,4% que asegura que no. «Resulta esencial adaptar los contenidos de la oferta formativa a las necesidades del mercado laboral de manera continua y ágil», señala Bote.