La solidaridad viaja a Valencia

Desde Valladolid ha emprendido viaje a otro municipios valenciano, Aldaia, una dotación de diez bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento y Protección Civil del Ayuntamiento para colaborar en labores de búsqueda, rescate, desescombro y limpieza. La decena de efectivos acude con una autobomba pesada urbana y un furgón de transporte con los medios materiales necesarios. Una vez allí, según la información facilitada por el Consistorio, el primer objetivo es coordinar ‘in situ’, con el responsable de emergencias de la zona, la situación actual y colaborar en las tareas de rescate que se precisen de la forma más efectiva.

Otro grupo de ocho bomberos de la capital burgalesa se desplazan hoy a Levante con distinto material de rescate y limpieza para colaborar «en cuanto sea necesario», según indicaron a través de su perfil en X. El convoy estará compuesto por un camión forestal con capacidad de arrastre para remolque, un furgón todoterreno y un ‘pick up’. Asimismo, se enviarán a Valencia dos generadores, dos electrobombas, una motobomba, material de iluminación, palas, cepillos y material de vadeo, así como tráctel para el arrastre de cargas.

Siguen sin ser activados, en cambio, los medios ofrecidos por la Junta de Castilla y León, a través de su centro de Coordinación de Protección Civil, que este viernes se incrementaron de forma que son ya 264 las personas y 120 los recursos puestos a disposición del Centro Nacional de Emergencias.

Dispuesto para actuar está también un grupo de 30 profesionales del Colegio de Psicología de Castilla y León formados en emergencias que ya se encuentran preactivados y en coordinación permanente con los responsables nacionales y con la Unidad Militar de Emergencias (UME). El Grupo de Intervención Psicológica en Desastres (GIPDE) de Castilla y León, formado por psicólogos profesionales, presta ayuda tanto a las víctimas directas como a sus familiares e, incluso, a los propios intervinientes en estas situaciones críticas.

Y mientras, se intensifican por toda la Comunidad las campañas de recogida de alimentos y productos de primera necesidad. Además de las que llevan a cabo las Cáritas parroquiales o Cruz Roja y toda clase de organizaciones y asociaciones, las instituciones de Castilla yLeón se han activado con el objetivo fundamental de coordinar y canalizar toda la ayuda. Así, el Ayuntamiento de Ávila realizó en la noche del viernes un primer envío con destino a Carcaixent de más de 1.000 kilos de alimentos y prendas de ropa y abrigo. El alcalde de la ciudad amurallada, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, se puso en contacto con la asociación Fallers Pel Món, con la que existe relación gracias a la celebración de las fallas en la capital abulense y a partir de ahí se activó un dispositivo de ayuda coordinado por Policía Local y Protección Civil. De este último cuerpo son los seis voluntarios que se han trasladado al municipio valenciano con dos vehículos de apoyo logístico y uno de intervención rápida.

Coordinación provincial

La Diputación de Valladolid también canaliza la ayuda que ofrecen miles de personas a través de sus ayuntamientos. Para facilitar la operatividad de todas las muestras de solidaridad, la institución provincial se encarga de recoger en cada consistorio las donaciones para transportarlas a una nave cedida altruistamente por una empresa en el Polígono de San Cristóbal de la capital vallisoletana. La misma coordinación con sus pueblos la está llevando a cabo la Diputación de Ávila que se está encargando de organizarla a través de determinados ayuntamientos seleccionados.

Por su parte, el de Valladolid ha habilitado tres centros cívicos, Delicias, José Luis Mosquera y el Campillo como puntos de recogida de material y alimentos básicos. Además, ha recomendado a los ciudadanos que lleven agua, leche, productos de alimentación no perecederos, artículos de limpieza personal y doméstica, pañales y compresas. La misma medida se ha adoptado en la capital burgalesa, donde su consistorio ha puesto en marcha una campaña de recogida de alimentos en los centros cívicos de Capiscol, San Agustín y Río Vena.