La partida de gasto social en los Orzamentos supera por primera vez los 10.000 millones de euros

La partida de gasto social en los Orzamentos supera por primera vez los 10.000 millones de euros




Un año más, la Xunta tendrá los Orzamentos en «tiempo y forma», algo que, aunque debería ser la norma, en el contexto político actual es un hito «extraordinario», como lamentó el presidente gallego, Alfonso Rueda, en la comparecencia posterior al Consello extraordinario en el que se aprobó el documento, que este sábado irá a la Cámara parlamentaria. Galicia será así una de las primeras autonomías que dará luz verde a su proyecto presupuestario para el año que viene, pese a tener que elaborarlos en un momento «en el que ni siquiera hay marcada una senda de estabilidad» estatal que permita la elaboración de las cuentas de la comunidad. Son, como explicó el responsable de la cartera de Fancenda, Miguel Corgos, unos Orzamentos aprobados en una situación «anómala», agravada por «falta de presupuestos estatales por segundo año consecutivo», que, si bien son «históricos», como destacó el presidente, «son conservadores». «Podría haber una cifra mayor, pero queremos ser realistas», abundó, sobre unos Orzamentos de «crecimiento económico», de «creación de empleo», de «gasto social», de «impulso a la vivienda», con más «apoyo a los concellos» y «menos impuestos». De esta forma, un año más Galicia vuelve a superar la partida anterior, alcanzando nuevamente los Orzamentos más altos de la historia: 13.954 millones de euros, un 2,6% más que los de 2024. Además, se superan por primera vez los 10.000 millones en gasto social, aumenta en 55 millones la partida para vivienda y se incluyen nuevas medidas para apoyar la emancipación de los más jóvenes y su acceso al mercado laboral, entre otras cuestiones.

La apuesta de la Xunta por las políticas sociales y los servicios públicos queda reflejada en la partida dedicada al gasto social, que por primera vez supera los 10.000 millones de euros, alcanzando los 10.267. Esto es, el 74% de los Orzamentos -o 3 de cada 4 euros- van para sanidad, educación, políticas sociales y empleo, con un aumento del 34% en comparación con la de hace 5 años, cuando la partida para gasto social se situó en los 7.676 millones. Sanidad recibe la prestación más elevada, prácticamente la mitad del total, con 5.434 millones, que permitirá llevar a cabo «actuaciones tan importantes» como el refuerzo del cuadro de personal de la atención primara, la mejora y modernización de las terapias y la atención asistencial del Sergas, llevar a cabo nuevos cribados, mejorar la prevención o continuar con el calendario de vacunación, entre otras cuestiones.

2.972 millones estarán destinados a Educación, que este curso, por primera vez, asume el coste de las matriculas universitarias. Además, como avanzó el conselleiro, permitirá la reducción de la ratio de alumnos por aula y garantizará la estabilidad de la financiación universitaria. Finalmente, 1.415 millones se destinarán a PolíticaSocial, para aumentar la partida de cuestiones como el servicio de atención en el hogar o el bono cuidado; y otros 446 para Empleo, con los que se trabajará por ajustar la oferta a la demanda en sectores necesitados de plazas, se orientará la FP a las necesidades del mercado de trabajo, e impulsar los sistemas de microcredenciales o el plan Galicia Retorna, entre otros.

Pero sin duda, como indicó Corgos, «la gran apuesta de esta legislatura es la vivienda«. Por primera vez, se aumenta la partida hasta los 221 millones, triplicando los presupuestos para suelo residencial y construcción de viviendas públicas hasta los 126 para avanzar en ese compromiso de »duplicar el parque público residencial en la presente legislatura« hasta los 8.000 inmuebles. Este año, además, uno de los colectivos prioritarios son los jóvenes, a los que, como anunció el presidente la semana pasada, se les reservarán hasta el 25% de las viviendas públicas destinadas a venta y un 40% de las destinadas a alquiler. Además, ya hay una cifra global de lo que se destinará a la ayuda de emancipación: serán 2 millones de euros, como avanzó Rueda, si bien está pendiente aún por confirmar la cuantía individual. Asimismo, se incluyen medidas para facilitar la tramitación y la incorporación al mercado de nuevas viviendas.

En lo que a los sectores productivos se refiere, y con miras a atraer inversión privada, estos Orzamentos contemplan un fuerte impulso a la ciencia, el turismo, la competitividad o la digitalización, entre otros. En ciencia, se construirá una fundación para la captación y retención del talento en el ecosistema innovador de Galicia, se construirá un nuevo edificio del centro de Supercomputación de Galicia, y se aumentará la financiación en el I+D+i. En Turismo, se impulsará la sostenibilidad, reforzando la desestacionalización del sector y el reequilibrio territorial «para que los recursos del turismo lleguen a todas las esquinas de Galicia»; y en competitividad, se facilitará el acceso al suelo industrial gratuito durante los primeros ocho años, se impulsará la internacionalización de las empresas gallegos, se desenvolverán planes de dinamización sectoriales y se apoyarán sectores específicos clave para el desarrollo de la Comunidad.

También se impulsará la digitalización, tanto en la administración como entre la ciudadanía, y se empleará la Inteligencia Artificial para consolidad Galicia como una región referente en Europa. En el sector primario, se apoyará especialmente la ganadería, se promoverá la reforestación y la silvicultura de especies autóctonas, y se desarrollarán el plan de dinamización del marisqueo y las ayudas de transformación y comercialización. Finalmente, en lo relativo a las infraestructuras, la recuperación de cuatro autovías con peajes fantasma anunciada este lunes permitirá a la Comunidad disponer de 30 millones anuales a mayores para nuevas actuaciones. Además, se continuará dando impulso a los planes de mejora de caminos rurales y a la concentración parcelaria.

En el ámbito de lengua y cultura, con estos Orzamentos la Xunta reforzará el plan de dinamización da lingua galega, y, del mismo modo, contempla el desarrollo de proyectos para el impulso del gallego en el ámbito de la inteligencia artificial. Todas ellas cuestiones que sirven «para impulsar un nuevo Pacto pola Lingua que saque esta riqueza de Galicia del debate político, con acuerdo y sin imposiciones», indicó el conselleiro. En materia de juventud, además de las ayudas a emancipación, se favorecerá la incorporación de los jóvenes al sector primario para impulsar el cambio generacional; y en medio ambiente, se mejorarán las condiciones del personal de prevención de incendios -que en 2025 trabajarán 8 meses, con el compromiso de llegar a los 9-, se mejorará la dotación de la ley de ordenación y gestión del litoral y se crearán las infraestructuras para los primeros pulmones verdes en las ciudades. Finalmente, se aumenta hasta los 641 millones la partida destinada a las entidades locales, a los que hay que añadir los 10 millones que se emplearán para financiar la subida del canon de Sogama. Se trata «del mayor esfuerzo de la historia con los concellos«, aumentando, por ejemplo el Fondo de Cooperación Local en 10 millones de euros.

Rebajas fiscales

También este jueves se aprobó el Proyecto de Ley de Medidas Fiscales y Administrativas que acompaña al documento, que incluye nuevas bonificaciones a pesar de que «Galicia ya es la CCAA con mejor tratamiento fiscal para las herencias de familiares directos». A partir de 2025, con el ánimo de estar también entre las mejores en las herencias entre parientes, se incluye una nueva reducción para que los primeros 25.000 euros de las herencias entre hermanos, suegros, cuñados, nueros y nueras no paguen nada, por lo que 2 de cada 3 de estas herencias no tributarán.

Además, habrá una nueva bonificación del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales. Será de un 75% para la adquisición, construcción o rehabilitación de edificios de viviendas destinadas a alquiler. En el caso de los locales comerciales destinados a vivienda, se aplicará un tipo reducido: del 8% al 7% para aquellas personas que vayan a dedicar un local a vivienda habitual que no supere los límites patrimoniales estipulados; del 6% al 3% para colectivos prioritarios como personas discapacitadas, víctimas de violencia de género o menores de 36 años; y hasta de un 100% en zonas poco pobladas.

Deuda y financiación autonómica

Una presentación del documento en el que el conselleiro de Facenda hizo especial hincapié en el endeudamiento de la Comunidad, que, recordó, no supone «un problema» para Galicia. «En el Gobierno gallego somos conscientes de que cualquier uso de recurso de endeudamiento debe ser controlado y limitado», aseveró, algo que se refleja en la estrategia autonómica: «después de soportar dos crises económicas, la financiera y la pandemia, Galicia está en el ratio de deuda-PIB de hace doce años y con una tendencia a la baja». La Comunidad pasó de este modo de ser una de las CCAA más endeudadas en el año 2008 a tener en 2023 una diferencia positiva de seis puntos sobre la deuda-PIB media de las autonomías. Mientras que el promedio de España es de un 21,7%, el de Galicia a finales del ejercicio 2023 se situó en el 15,7%. «Esto supone que cada gallego debe 2.215 euros menos que la media», destacó: 4.496 euros frente a los 6.711 estatales.

De este modo, con el ratio entre deuda y PIB más bajo de la última década -con previsión de que siga bajando- el responsable de Facenda tiene claro que la Comunidad podrá llegar «sin realizar ningún esfuerzo en las políticas de gasto« al 13%. Datos que »corroboran la mejor situación de Galicia en la sostenibilidad de sus financias«, reafirmando así la posición del Ejecutivo de que »aceptar una condonación de deuda no es prioritario para la comunidad y tampoco ventajoso«.

Asimismo, haciendo un análisis pormenorizado de los datos, explicó que «cada año la diferencia entre la recaudación de los tributos cedidos y lo que termina en el sistema de financiación autonómico es mayor«. Entre los años 2008 y 2023, indicó, la recaudación total de los impuestos se incrementó en un 61,5% en global, mientras que los recursos transferidos a las CCAA solo crecieron un 43,6%. Para Galicia, un 28,1%, lo que indica »que tampoco es beneficioso« para la Comunidad, aseveró.

Fuente: www.abc.es