La desolación de Marcao tras la derrota del Sevilla ante la Real
El brasileño provocó un penalti sobre Zubimendi, que sentenció el partido
Una de las imágenes que ha dejado este Sevilla – Real Sociedad ha sido la de Marcao sentado en el banquillo del Sánchez-Pizjuán en completa soledad. El brasileño se mostró abatido tras el pitido final del encuentro, puesto que tuvo gran parte de culpa de la derrota. El central le asestó un golpe en el cuello a Zubimendi dentro del área y el colegiado Muñiz Ruiz pitó penalti a favor de los donostiarras, previa revisión VAR. Una pena que materializó Oyarzabal y que sentenciaría el partido.
Además, el jugador tuvo que ser sustituido tras ver la tarjeta amarilla y la grada sevillista no dudó en pitarle mientras salía del terreno de juego. Un mensaje que no se ha tomado nada bien el defensa, el cual no se levantó de su asiento tras finalizar el encuentro y permaneció unos minutos cabizbajo, visiblemente afectado. Un ayudante de García Pimienta se acercó al jugador para consolarle y animarle a que se marchase al vestuario con el resto de sus compañeros.
Titular junto a Kike Salas
Lo cierto es que su trayectoria en el Sevilla FC no está siendo un camino de rosas. Es la primera temporada que las lesiones le están respetando. No obstante, el brasileño peca de ir pasado de revoluciones, algo que ha puesto en apuros al equipo en diversas ocasiones. Su contundencia dentro del área ha penalizado al grupo alguna que otra vez, pero Pimienta se ha visto obligarlo a alinearlo junto a Kike Salas ante las lesiones de Badé y Nianzou.
Precisamente el técnico sevillista ha admitido que ha sido un error que no debería cometerse, pero le ha querido también echar un capote a su jugador en la rueda de prensa posterior al partido: «Marcao comete el error del penalti. No ha estado mal, pero no nos deberíamos equivocar de esa manera».