La conferencia de Líbano recauda unos 800 millones de euros para reforzar la ayuda humanitaria
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La comunidad internacional promete otros 200 millones para apoyar al Ejército libanés
MADRID/BRUSELAS, 24 Oct. (EUROPA PRESS) –
La conferencia convocada en Francia para relanzar la ayuda humanitaria a Líbano ha concluido con compromisos totales de 800 millones de euros, que irán destinados tanto a atender las necesidades más inmediatas de la población como a fortalecer el papel de las Fuerzas Armadas libanesas, ha anunciado el presidente galo, Emmanuel Macron.
El mandatario ha enfatizado en declaraciones al portal Brut que esta cumbre, a la que ha asistido el primer ministro de Líbano, Nayib Mikati, tenía como objetivo «apoyar al pueblo y a la soberanía» de este país, escenario de una escalada de la violencia tras el recrudecimiento de los bombardeos israelíes sobre objetivos del partido-milicia chií Hezbolá.
El propio Macron ha prometido que Francia entregará 100 millones de euros, mientras que Alemania ha anunciado otros 96 millones, de los cuales 60 corresponden a proyectos de desarrollo y 36 a ayuda humanitaria, como ha explicado en París la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock.
El ministro de Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot, ha aplaudido en rueda de prensa las «contribuciones sustanciales» pactadas en esta cumbre, señalando que la comunidad internacional ha demostrado estar «a la altura». Al margen de los 800 millones de euros en ayuda, se han acordado otros 200 millones para el Ejército libanés.
RESPALDO DE LA UE
En declaraciones previas a la conferencia, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha señalado que la cita es importante para dar apoyo a la nación libanesa y «restaurar su soberanía y sus instituciones».
En este sentido, ha denunciado que los ataques israelíes contra Líbano, donde responde a la ofensiva de la milicia chií de Hezbolá, «no es proporcional» y ha causado un alto balance de bajas civiles, de más de 2.400 muertos y 1,2 millones de desplazados.
Borrell ha reiterado la necesidad de llegar a un alto el fuego, base para pacificar la región, y luchar contra «la impunidad». «Hay que mirar a todos los actores en la región para que respeten el Derecho Internacional. El número de daños colaterales a la población en Líbano tiene que tenerse en cuenta», ha subrayado.