La ciudad de Galicia elegida como una de las ciudades más felices de España para vivir según un estudio
La felicidad es una de esas emociones tan deseadas como difíciles de definir. Para algunos, puede estar en los pequeños detalles del día a día, como una buena relación con sus seres queridos o la posibilidad de disfrutar de espacios al aire libre. Para otros, la felicidad puede depender de factores externos más complejos como la estabilidad económica, la calidad de los servicios públicos o incluso el tiempo que pasamos en los desplazamientos cotidianos. Lo que está claro es que la felicidad se construye desde múltiples frentes y las ciudades, como escenarios de nuestra vida, juegan un papel fundamental en la generación del bienestar. En ese sentido, un reciente estudio conocido como el Índice de Ciudades Felices, ha tratado de medir qué ciudades en el mundo proporcionan un entorno propicio para que sus habitantes se sientan felices y satisfechos.
El estudio ha sido elaborado por más de 200 voluntarios y se basa en una serie de factores que van desde el tamaño de la ciudad, hasta el acceso a recursos, áreas verdes o la calidad de las políticas públicas. Aunque el concepto de felicidad es subjetivo y varía según las expectativas de cada persona, el estudio ha conseguido identificar qué ciudades ofrecen mejores condiciones para el desarrollo de una vida feliz.
Dentro de España, una de las ciudades que ha destacado en este índice es Vigo, en Galicia, que ha sido incluida entre las más felices para vivir. Ocupando el puesto 58 a nivel mundial, la ciudad gallega se posiciona como un referente de bienestar dentro de nuestro país. Este reconocimiento no es casualidad, y refleja el trabajo de la ciudad por mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos en diversos aspectos que impactan directamente en su felicidad.
Vigo, una ciudad en armonía con la felicidad
Vigo, la ciudad más grande de Galicia, destaca por ofrecer un equilibrio entre desarrollo urbano y calidad de vida. Sus habitantes disfrutan de un entorno privilegiado que combina una vibrante vida urbana con un acceso privilegiado a la naturaleza. Las famosas Islas Cíes, a las que se puede acceder desde su puerto, ofrecen uno de los parajes naturales más impresionantes de Europa, lo que contribuye a que los vigueses disfruten de una excelente calidad del aire y de abundantes espacios verdes.
Además, Vigo ha demostrado un compromiso notable con la movilidad con políticas que reducen la dependencia del automóvil y apuestan por alternativas más ecológicas. Lo que ha supuesto que sus habitantes puedan disfrutar de una mayor accesibilidad, reduciendo los tiempos de desplazamiento, un factor que influye directamente en su nivel de satisfacción personal y profesional.
Otro de los factores que ha posicionado a Vigo entre las ciudades más felices es su economía. En ese sentido, la ciudad es un importante núcleo industrial y comercial, con especial relevancia en el sector de la automoción y la pesca. Respecto al sector automovilístico, la ciudad gallega es sede de la primera y más importante fábrica de coches de Citroën en España. Mientras que el puerto de Vigo es el que más pescado fresco descarga de Europa. Este dinamismo económico, acompañado de un coste de vida relativamente accesible en comparación con otras grandes ciudades de España, ha hecho que Vigo sea un lugar propicio para aquellos que buscan un equilibrio entre trabajo y bienestar.
Por último, el estudio del Índice de Ciudades Felices no solo valora los aspectos tangibles como el acceso a áreas verdes o la economía, sino también factores como la calidad de la educación. En ese contexto, la ciudad cuenta con un sistema educativo con varias universidades y centros de formación técnica que contribuyen a que los jóvenes y adultos puedan desarrollarse profesionalmente sin tener que abandonar la región.