La CEV cifra en más de 9.365 millones las pérdidas en el tejido productivo por la dana, según las primeras estimaciones
El empresariado pide «un apoyo más potente y ágil» y una respuesta coordinada y urgente
VALENCIA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) –
La reciente DANA ha dejado una cifra preliminar de pérdidas económicas que supera los 9.365 millones de euros, con la industria como el sector más perjudicado, según ha informado este miércoles la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV).
Estas cifras, aunque «alarmantes» para la patronal, «son solo una estimación inicial, ya que muchas empresas todavía no han podido valorar el alcance total de los daños y son varios los sectores a los que todavía no les es posible proporcionar cifras definitivas», ha puntualizado en un comunicado.
El impacto de la DANA sobre el sector primario ha sido especialmente grave. Las lluvias torrenciales afectaron a 33.728 hectáreas en nueve comarcas, con graves perjuicios en cultivos de cítricos, caqui, hortalizas y viveros, así como daños significativos en infraestructuras agrícolas, maquinaria y explotaciones ganaderas. La estimación de daño que hace la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) asciende a 1.019 millones de euros
El sector industrial es el que ha sufrido «un golpe más devastador», ha lamentado la CEV. La Federación Empresarial de Agroalimentación de la Comunidad Valenciana (Fedacova) sitúa en más de 3.350 millones las pérdidas en su sector.
Según la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (FEMEVAL), las pérdidas en el sector metal ascienden a 1.488 millones de euros, afectando a 6.150 empresas y poniendo en riesgo el empleo de 47.549 personas. Por su parte, la Federación de Empresas de la Madera y el Mueble (Fevama) estima daños por 1.300 millones de euros, con afectación a 1.300 empresas y 7.000 trabajadores.
Otros sectores como la transformación del plástico, representado por la Asociación Valenciana de Empresarios de Plásticos (Avep), estiman un impacto inicial de 61,7 millones de euros, mientras que el sector químico, representado por la Asociación Química y Medioambiental del Sector Químico de la CV (Quimacova), señala pérdidas en instalaciones, logística y comercio que superan los 130 millones de euros.
Dentro del sector servicios, Confecomerç cifra en más de 1.500 millones las pérdidas registradas en el sector comercio. En el caso de la hostelería, una primera aproximación sitúa en más de 300 millones las pérdidas.
La Asociación de supermercados de la Comunidad Valenciana (ASUCOVA), por su parte, las sitúa en 95 millones. El sector de la imagen personal (peluquerías, estética y barberías) calcula pérdidas de 15 millones de euros, con más de 350 profesionales afectados.
La misma cifra da el sector de la formación, representado por la Asociación Empresarial de Centros de Formación de Valencia (CECAP-CV). En tanto, los panaderos y pasteleros de la provincia reportan daños que ascienden a 11 millones de euros.
La Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística (FVET) cifra en 47 millones de euros las pérdidas calculadas hasta el momento. El sector del taxi, por su parte, estima en más de 8,3 millones las pérdidas registradas, y la Asociación Empresarial de Transporte de Viajeros de Valencia (Adiva) comunica pérdidas por valor de 25 millones.
Las consecuencias económicas se extienden también al turismo, donde preocupa la recuperación de eventos y grupos programados para los próximos meses en la ciudad de València, ha añadido la CEV.
Las consecuencias sobre el empleo amplifican los daños causados. El total de ERTE registrados asciende a los 1.870, mientras que el número de personas trabajadoras bajo la cobertura de un ERTE (ya sea en suspensión o reducción de jornada) es de 21.295. Además, se han registrado 23 ERES, que afectan a 125 personas trabajadoras.
UNA LLAMADA URGENTE A LA ACCIÓN
Teniendo en cuenta que esta cifra de pérdidas podría «incrementarse significativamente», cuando pueda hacerse una valoración más ajustada a la realidad; las consecuencias que esto tendría sobre el empleo, y que las pérdidas calculadas «no incluyen el lucro cesante pendiente de cuantificar», empresarios y representantes sectoriales han subrayado la necesidad de un esfuerzo mayor por la reconstrucción.
El empresariado ha solicitado «un apoyo más potente y ágil» que ayude a mitigar los devastadores efectos de la dana. «La magnitud del desastre pone de manifiesto la urgencia de una respuesta coordinada que permita a los sectores afectados recuperar su actividad y garantizar la estabilidad laboral en la provincia», ha defendido la CEV.