Javi Galán, la última contradicción de Simeone
Escrutado con el ojo resultadista con el que lleva analizándose todo en el Metropolitano desde hace más de una década, el punto que le devolvió al tercer puesto de la Liga pudo parecer un botín aparente para el Atlético de Madrid, pero el empate (1-1) en Anoeta dejó otra vez al descubierto la falta de ambición y colmillo de Diego Simeone pese al arsenal ofensivo con el que, este año sí, cuenta en su plantilla. Los rojiblancos sorprendieron en el primer minuto con el gol de Julián Alvarez (segundo fichaje más caro en la historia del club), aunque a partir de la celebración llegó prácticamente la nada en ataque. Un vacío inquietante que recordó al sufrido en las visitas a Balaídos y San Mamés, si bien los triunfos en el descuento de ambas citas (0-1) rebajaron entonces el tono de las críticas y la preocupación.
Ante los donostiarras, el argentino renunció a buscar el segundo tanto y en un ejercicio de cholismo puro, sin máscaras ni tapujos, su equipo acabó prácticamente atrincherado en el área hasta que Sucic rompió el cántaro con un golazo que facilitó un regalo de Rodrigo de Paul.
Defensa, defensa y más defensa con la presencia en el lateral izquierdo de Javi Galán, que ante la Real Sociedad disfrutó de su primera titularidad en esta temporada. Invisible para el técnico hasta el derbi ante el Real Madrid (jugó los últimos 15 minutos), la alineación del extremeño fue la enésima probatura de un Simeone que no da con la tecla para divertir a la parroquia colchonera y que se marcha al parón de selecciones a siete puntos ya del líder Barcelona y a cuatro de los de Ancelotti.
Decisivo con la asistencia que dio origen una semana antes al empate de Correa en el derbi, Javi Galán fue una de las pocas notas positivas del Atlético de Madrid en Anoeta, donde el defensa también inició la jugada del 0-1 con un pase a Griezmann y tuvo que apretar los dientes multiplicándose ante las acometidas del japonés Kubo. El lateral, cedido en el mercado invernal de la pasada a la Real Sociedad, volvió a ponerse este verano a las órdenes de un Cholo que desde su fichaje nunca ha parecido terminar de confiar en él, como evidenció ese préstamo al conjunto vasco y la ausencia total de minutos en el actual curso hasta el estreno en el duelo con el Madrid. Pese a su perfil de carrilero zurdo, como exhibió durante su etapa en el Celta (club del que fue fichado en 2023), el técnico argentino había preferido a cuatro jugadores a lo largo de esta campaña para ocupar esa demarcación: Reinildo, Riquelme, Lino y en Vigo hasta llegó a priorizar a su hijo Giuliano por delante de él.
Pese a su ostracismo, Galán nunca ha tenido una mala palabra con el Atlético ni un mal gesto con su técnico. «Contento por sumar minutos y ayudar lo máximo posible, muy contento», resumió el futbolista al término del partido ante los donostiarras. La actuación del zaguero en Anoeta gustó a Simeone, que, sin embargo, sorprendió con sus declaraciones tras ser preguntado por él. «Hizo un partido muy bueno. Jugar contra Kubo no es sencillo. Puede darnos más en ataque, en los entrenamientos lo hace y se lo exigiremos. Tiene una habilidad en el uno contra uno con pierna natural en la izquierda que no nos dan Riquelme, Giuliano y Lino. Dependerá de él y de lo que crezca», analizó. Una reflexión que genera una duda: si tan bien lo hace en los entrenamientos, ¿por qué no tiene más oportunidades?