Ilia Topuria, de ser ‘rechazado’ por la UFC a convertirse en una leyenda de la compañía
Que la vida da muchas vueltas es más una realidad que una frase manida. No hay faceta que se escape a este dicho, pues vivir, al final, es evolucionar. Y eso es lo que le ha ocurrido durante su trayectoria profesional a Ilia Topuria. Hubo un tiempo en el que al campeón del peso pluma de la UFC se le cerraban las puertas de la mayor compañía de artes marciales mixtas, aunque solo fuera de manera temporal.
Fue hace cinco años, cuando Topuria ostentaba un récord profesional de 6-0 y acababa de pelear en Cage Warriors. El luchador hispano-georgiano ya demostraba con grandes actuaciones internacionales que su nivel estaba fuera de lo normal. Pero no lograba derribar la barrera de la UFC, algo que le suponía una gran frustración, consciente de que tenía un nivel para estar peleando donde lo hacían los mejores.
En una entrevista con Gonzalo Campos, en el podcast Generación MMA, Topuria reconocía que estaba «decepcionado por el tema de la UFC». «Yo más que nadie espero llegar a la UFC y demostrar el nivel que tengo, por eso me da mucha rabia muchas veces. No sé, me da mucha rabia, pero mi momento llegará seguro y lo voy a demostrar», manifestaba.
«Podría pelear por el título de la UFC en un mes»
A Topuria, que siempre confió en sus posibilidades, se le tildaba de arrogante en ocasiones por hacer declaraciones que, en aquel momento, estaban lejos de suceder. Pero a él no le importaba. «Voy a respaldar todo lo que digo, porque no lo digo por decir, todos los que me conocen saben que lo que digo es cierto», decía.
«Puede ser que después pierda, todos podemos perder, pero lo digo desde lo más profundo de mi corazón, yo pienso que podría pelear dentro de un mes por el cinturón de la UFC. Lo digo porque lo pienso, no lo digo para demostrarle mi confianza a nadie. No descansaré hasta conseguirlo», remataba en la citada entrevista.
Cinco años más tarde, Topuria no solo es campeón de la UFC, sino que además ha defendido recientemente su título con éxito ante una de las grandes leyendas de la compañía, sentándose en la misma mesa donde comen los más grandes. Además, después de su último triunfo, ya está considerado por todos como una superestrella de las MMA.