HLA ALICANTE – BETIS BALONCESTO: Enfocado en tocar las mismas teclas de la dinámica ganadora

Los verdiblancos, que ya hollaron el liderato de la tabla la pasada jornada aunque fuese por unas horas, están en buena línea. Parece que en el camino correcto. Destiló el equipo tanta solidez como contundencia ante el Tizona y seguramente, aunque ante un rival diferente, querrá tocar esas mismas teclas este domingo en su visita al histórico Centro de Tecnificación de Alicante, ahora llamado Pedro Ferrándiz. Allí aguarda el HLA Alicante, equipo del segundo escalón de la categoría (a priori) que ha empezado la temporada con el pie izquierdo. Cayó con el Real Valladolid en la jornada inaugural (64-73) y también con el Odilo FC Cartagena (72-69), un recién ascendido, en la segunda. Como puede apreciarse, ambos encuentros se resolvieron en marcadores cortos y ajustados. No han llegado los alicantinos a los 70 puntos a favor. Un dato que llama la atención. Así que ya puede hacerse una idea, aunque sea muy general, del tipo de partido que le puede esperar al conjunto verdiblanco.

El Betis, que se mostró más intermitente en San Sebastián aunque acabase imponiéndose con el mazo (62-77), experimentó un salto de calidad en su juego con el Tizona. Su ataque fue más diverso y rico, provisto de más matices, menos previsible. Seguramente porque Renfroe, como Cvetkovic, al fin encontraron aliados en el juego interior, generando las esperadas sociedades con los hombres altos para dotar al baloncesto albiverde de mayor verticalidad. Curiosamente, el día que menos triples liberó el Betis (apenas 14 intentos) acabó siendo el de mayor producción anotadora. Se disparó hasta los 95 puntos y podría haber alcanzado la centena si no llega a mediar ese puntito lógico de relajación de los últimos minutos propio de los partidos que están vistos para sentencia mucho antes.

Después de un inicio muy frío del Betis, reflejado en un 0-8 de parcial, los de Gonzalo García encendieron tanto el motor defensivo como el ofensivo para recetarle a su rival un 20-6, marcharse al descanso con diez de ventaja (44-34) y acabar el trabajo que ya estaba encarrilado en el tercer cuarto. De cara a su evolución como grupo esta temporada, lo mejor que le puede pasar al Betis Baloncesto es que no se haga el remolón en el trabajo fiándolo todo al talento. Dar cera, pulir cera, ya se sabe. Y que se faje en defensa porque puede hacerlo por nivel físico y facultades de sus jugadores. Al menos, esa impresión ha dado en este par de jornadas. Que son pocas aún para sacar demasiadas lecturas concluyentes.

Dos exverdiblancos en Alicante

Hay que seguir viendo al equipo y, en este sentido, esta comparecencia en el Centro de Tecnificación (cancha que fuera de ACB muchos años) puede ser una buena vara de medir. Otro interesante termómetro como ya lo fue el del Tizona. Los automatismos se perfeccionan entrenando, pero sobre todo en situaciones reales de partidos. Y este domingo, además, se enfrenta el Betis a un contexto nuevo porque se mide a un equipo de nivel con la necesidad de estrenar su casillero de victorias.

En la cabina de mando del HLA Alicante continúa el tándem exverdiblanco conformado por Asier Alonso en la dirección deportiva y Antonio Pérez Caínzos, primer entrenador, en la dirección técnica. Se ha reformulado la plantilla respecto a la pasada campaña y parece que, nombre por nombre, se ha hecho un buen trabajo. En especial en el puesto de alero, con la contratación de dos jugadores internacionales con sus selecciones, atléticos y veteranos como el camerunés Moute A Bidias y el belga Mwema; y sobre todo, en el cinco, donde han apostado por los servicios del danés Kevin Larsen, exestudiantil cuya opción para cerrar el juego interior fue también contemplada por el Betis Baloncesto.

Además, el Lucentum reclutó a Gerard Jofresa, baja en las dos primeras jornadas, y se la jugó en el puesto de base con Jordan James King, de quien inevitablemente hay que preguntarse para empezar si con semejante nombre se puede jugar mal al baloncesto. Mide 1,83 metros, tiene 23 años y acaba de salir de la universidad estadounidense, pero en su puesta en escena en Europa ha convencido este novato que podría erigirse en la principal referencia anotadora alicantina. Un equipo muy físico que está por verse hacia dónde tira. No se sabe aún.

Como es lógico cuando arrancan las temporadas, quedan muchas incógnitas por resolver. Aunque el Betis Baloncesto tiene muy clara su dirección desde que el Grupo Hereda desembarcó en Sevilla. Quiere estar arriba, así se lo ha propuesto, sin miedo y asumiendo toda su presión aun sabiendo que la competencia en la zona noble será alta. Renfroe se enchufó la pasada jornada, como Radoncic y Kasibabu, DeBisschop se estrenó tras recuperarse de la lesión, Rubén López le ha cogido el aire a la categoría y Benite se ha encelado con el aro en los momentos claves de los dos partidos ligueros ya disputados, sacando todo su talento a pasear. Insistir en estas líneas maestras, sin descuidar la defensa, puede ser el modo más factible de que el Betis Baloncesto active la velocidad de crucero. Todos los rivales jugarán súper motivados contra el conjunto verdiblanco, pero esto se da por descontado y forma parte de las dificultades de esta aventura que el Betis quiere culminar lanzando los confetis del ascenso. Para eso, queda un mundo. Piano, piano.

Derrota del Naturavia Morón

Sigue sin inaugurar su casillero de triunfos en Primera FEB el CB Naturavia Morón, que cuenta sus partidos por derrotas. Ayer, en choque de la tercera jornada, se quedó con las miel en los labios jugando en el pabellón Alameda contra el Alimerka Oviedo (84-89). Después de un gran primer tiempo del conjunto de José Antonio Santaella, que se retiró a los vestuarios ganando por ocho (50-42) tras un excelente segundo parcial (30-22), acabó sucumbiendo en los últimos minutos, con los carbayones reponiéndose en el tercer periodo (17-19) y, sobre todo, en el cuarto (17-28). Con 74-69, el Morón encajó un 0-9 que cambió el decorado y entregó el mando del partido al conjunto visitante. Ya no lo soltaría. El choque, igualadísimo en la recta final, lo decidió el Alimerka Oviedo punto a punto desde la línea del tiro libre. Una antideportiva señalada a BJ Mack, el mejor de los anfitriones (18 puntos y cinco rebotes), definió el duelo dejando sin opciones a los locales. En el Morón también destacaron Tamba (16 puntos) y Kouadio (15). El próximo viernes 18 de octubre, los sevillanos visitarán al Gipuzkoa Basket (20.30 horas).