Galicia vuelve a heredar el legado de Torrente Ballester
La pasada semana era noticia la reinauguración de la Fundación Gonzalo Torrente Ballester (FGTB), en Santiago. La institución que el histórico autor dejó creada para legar al pueblo gallego su herencia intelectual arranca, coincidiendo con el 25 aniversario de su fallecimiento, una nueva etapa con el estreno de una exposición en su sede. Pero el relanzamiento aventura un recorrido mucho más extenso: además de la revitalización de sus instalaciones, que ponen la obra del fundador al alcance inmediato, hay proyectos que ya están en marcha: próximamente se celebrará un ciclo de conferencias bajo el título ‘Tres Torrentes’, y, más en clave de futuro, la fundación trabaja en la recuperación de una colección de «más de 300» grabaciones inéditas con anotaciones y pensamientos del escritor; además de en la traducción de sus obras a varios idiomas y en la museización de una planta de la sede.
«Lo que queremos es tanto difundir la figura de mi padre al público como conservar el legado fundacional. Esas son las dos vertientes que queremos desarrollar: conservar pero también dar a conocer». Lo explica Fernanda Torrente, presidenta del nuevo patronato de la FGTB e hija de su fundador. La mira está puesta en la carrera hacia el próximo Xacobeo 2027, y hasta entonces será tiempo para «desarrollar proyectos»; entre ellos, la digitalización de audiocintas y la traducción a idiomas de varios libros de Torrente relacionados con Compostela. «Estamos a cincuenta metros de la Catedral y queremos hacer una oferta que sirva también para los peregrinos que visitan la ciudad», apunta la presidenta de la institución que alberga el archivo personal del autor, con más de 12.000 volúmenes, 5.000 fotografías e incluso objetos personales y correspondencia que sirven como ventana hacia su proceso creativo.
«La otra faceta que desarrollaba mi padre era la conferencia, el diálogo, la tradición oral que hay en Galicia», cuenta. Por eso, en la FGTB se proponen la creación de un calendario de actividades acorde. La primera acción será presentar las reediciones de algunas de sus novelas; entre ellas, una de ‘Quizá nos lleve el viento al infinito’ y otra de ‘Ifigenia’ editada por la Universidade de Vigo (UVigo). Y se suman las versiones en portugués de ‘Filomeno, a mi pesar ‘y ‘La Zaga Fuga’. «Vamos a hacer una mesa redonda con varios profesores universitarios y entendidos en la materia en la que hablen de estas obras», afirma Fernanda Torrente. La segunda va a ser la presentación de los premios Torrente-Ballester de la Diputación de La Coruña, y la acompañará la tercera propuesta: una mesa redonda. Todo ello está previsto para noviembre.
Los planes continúan en el medio y largo plazo: «Estamos diseñando varias actividades y esperamos poder tener la Fundación operativa en unos cuantos meses», cuenta su presidenta. Por esa línea se trabaja en dos exposiciones: la de Juan Giralt que acoge actualmente la Fundación y otra en colaboración con la Biblioteca Nacional, la Junta de Castilla y León y el Concello de Santiago sobre la figura de Torrente que se inaugura esta semana en la Biblioteca Nacional de Madrid. Esta última, a posteriori, itinerará a Ferrol y, si se cumplen los pronósticos, a Salamanca. «Y lo último será, esperamos, que se vuelva el germen para museizar una de las plantas del edificio de la Rúa do Vilar», convirtiéndose en muestra permanente. «Esperemos que en estos dos años preparemos estos proyectos y para el Xacobeo tengamos la Fundación abierta de una manera más regular al público, con la museización de esta planta», resume.
Al rescate de la voz del autor
Igual de ambiciosa es su otra iniciativa: la restauración y digitalización de las grabaciones en las que Torrente plasmó sus ideas, sus opiniones y sus métodos durante dos décadas, entre los años sesenta y los ochenta. «Grababa sus pensamientos y luego escuchaba ese material, era su manera de reflexionar en alto sobre la creación. Lo utilizaba en sus novelas; es realmente interesante ver el proceso de creación que reflejan», dice su hija sobre la colección de casetes y cintas magnetofónicas: «Vamos a intentar hacer una transcripción y difundirlas de la mejor manera posible. No está todavía decidido cómo, pero probablemente pondremos algunas en nuestra web o hagamos pódcasts».
En adelante, la FGTB deberá afrontar los retos propios de toda puesta en marcha; principalmente, la búsqueda de fuentes de financiación. Pero lo hará cumpliendo con la voluntad de su fundador: poner a disposición de todos su legado para el estudio y la investigación; pero, sobre todo, para poder ver un poco de aquella Galicia que veía Torrente.