Francisco, Elisabet y Javier siguen desaparecidos tras un mes de la dana: «La situación es insoportable»
Hay un cuarto hombre desaparecido de Albal cuya identidad no ha trascendido
VALÈNCIA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) –
Francisco, Elisabet, Javier y otro hombre cuya identidad no ha trascendido siguen desaparecidos cuando se cumple un mes de la catastrófica Dana y la desesperación y la pena se está apoderando de sus familias y allegados: «La situación es cada vez más insoportable», ha llegado a indicar el alcalde de Montserrat, Sergio Vilar, municipio al que pertenecía Francisco.
Los trabajos de búsqueda de víctimas se han intensificado en zonas como L’Albufera, marjales, la zona de la costa marítima y zonas terrestres como el Barranco del Poyo, Loriguilla, Sot de Chera o Montserrat, pero no hay rastro de los cuatro desaparecidos.
Esta semana se halló a un quinto desaparecido, un hombre cuyo cuerpo sin vida fue recuperado el pasado lunes entre los términos municipales de Benaguasil y Vilamarxant.
Montserrat, Cheste, Sot de Chera y Albal. Estos son las cuatro localidades en las que residían las víctimas que todavía no han sido encontradas. En el caso de Montserrat ha desaparecido Francisco, de 64 años, quien fue arrastrado por la riada después de dejar a sus nietos a salvo encima de su coche cuando se dirigía al municipio.
El alcalde ha explicado, en declaraciones a Europa Press, que se han hecho búsquedas de todo tipo, con voluntarios, con bomberos, policías y la UME pero «no hay manera de encontrarlo», ha lamentado, al tiempo que ha trasladado su pesar a la familia. «Un mes desde entonces y no tenemos nada», ha indicado.
Francisco desapareció a la altura del polígono de Les Valletes Montserrat, cerca de un supermercado, que se llenó de agua con la Dana. Según ha explicado el primer edil, el hombre se trasladaba ese fatídico día desde la urbanización de Les Valletes hasta el pueblo con sus dos nietos en el coche, de cinco y 10 años.
En un momento determinado se encontraron con la riada y el hombre decidió salir del vehículo. Lo primero que hizo fue poner a sus nietos a salvo en el techo del coche. Él no llegó a subir: «No sabemos si su intención era buscar ayuda o es que no le dio tiempo a subir. Los niños dijeron luego que habían visto cómo la corriente se llevaba a su abuelo», ha descrito el alcalde.
Un vecino pudo rescatar a los niños y se los llevó a su casa, desde donde llamó a la Policía Local para contar lo ocurrido. En el retén se encontraba en ese momento Sergio Vilar junto a los agentes.
Tras la llamada, se desplazaron a por los niños y los trasladaron con su madre a su vivienda. A la mañana siguiente comenzó la búsqueda del hombre «pero no ha habido manera de encontrarle un mes después. Es muy triste», ha lamentado Vilar. «La búsqueda sigue y nosotros ayudamos en lo que podemos a la UME o a los bomberos, pero no podemos hacer más porque no es competencia nuestra», ha dicho. Hay víctimas que han sido halladas a kilómetros de distancia del lugar en el que desaparecieron.
«LIMBO LEGAL»
En Cheste figura como desaparecida Elisabet, una mujer de 38 años que el día 29 de octubre viajaba con su madre en su vehículo camino del trabajo cuando se produjo la riada. Su progenitora fue encontrada sin vida días después pero ella no ha aparecido.
Ernesto, tío de Elisabet, ha explicado a Europa Press que llevan «como pueden» la situación pero está muy preocupado por los dos hijos hijos de Elisabet, una niña de cuatro años y un joven de 18 que, ahora mismo, están en un «limbo legal».
Al respecto, ha indicado que sus sobrinos –la menor vive con el padre mientras que el joven lo hace el abuelo materno– «tienen derechos tras el fallecimiento de su madre pero no los pueden ejercer porque su madre está desaparecida y no está demostrado que haya fallecido». Sin un certificado de defunción los niños no son huérfanos legalmente y no pueden recibir ayudas. «Están en un limbo legal, y ésa es ahora mi preocupación», ha insistido.
«El niño, con el que hablo casi todos los días, me ha dicho que se va a dejar los estudios y se va a poner a trabajar para ganar dinero. Dice que ya no puede pagar la autoescuela porque se la pagaba su madre y ahora no está y no puede seguir así», ha relatado a modo de ejemplo.
Y ha añadido: «Con apoyo económico mi sobrino podría seguir haciendo una vida medianamente normal, entre comillas, y no tendría que ir pidiendo nada a nadie. Estamos viendo de qué manera, si a través de la asistencia social o del Ayuntamiento, se pudiera dar algo provisional». «Tenemos que ver opciones», ha señalado.
En relación con la búsqueda, Ernesto ha explicado que saben más o menos el punto en el que desaparecieron su sobrina y su hermana puesto que grabaron un par de vídeos con el teléfono móvil en los que se identifica la zona.
A su hermana la encontraron en la localidad valenciana de Quart de Poblet días después y, sobre su sobrina, Ernesto cree que sigue en su coche, que no ha sido hallado tampoco. «Cuando encuentren al coche, le encontrarán a ella. Estoy casi seguro», ha señalado. «Mi hermana seguramente se quitó el cinturón y pudo salir del coche o salió despedida, pero mi sobrina quizá no pudo. No sabemos lo que pasó, sólo lo saben ellas», ha lamentado.
Los expertos siguen cuadriculando la zona y llevan perros especializados y dispositivos específicos con GPS para localizar vehículos. «Es complicado porque, sin ir más lejos, el otro día hallaron un coche con dos metros de grava. Pero tienen que encontrarla», ha pedido.
Por otro lado, en Sot de Chera permanece desaparecido Javier, de 51 años, cuyo hijo pequeño falleció mientras ambos se encontraban en su vivienda y la fuerza del agua la derribó. Su mujer y su otra hija lograron salvarse.
El alcalde de la localidad, Tomás Cervera, ha indicado que era una familia que ese día de la catástrofe estaban en una finca que el agua «tiró abajo». «Parte de la familia sobrevivió y la otra mitad, el niño y el padre, fallecieron», ha dicho. Pero al padre no se le ha localizado. Por último, en Albal sigue desaparecido un hombre, extranjero, cuya identidad no ha trascendido hasta el momento.