El ‘tesoro’ botánico de Atapuerca
La Sierra de Atapuerca alberga una cuarta parte de la riqueza florística de toda la provincia de Burgos y, entre ellas, destacan cerca de 150 ejemplares de una especie protegida en el Catálogo de Flora de Castilla y León, denominada ‘Jonopsidium savianum’, siendo la Sierra de Atapuerca el único lugar donde puede observarse.
Se trata de una diminuta crucífera entre encinares claros de la meseta superior de la Sierra. En la Península Ibérica se distribuye por Castilla y León y La Rioja y dentro de la Comunidad solo existe en las provincias de Burgos y Soria (Sierra de Cameros). En la Sierra burgalesa se ha encontrado en apenas 20 metros cuadrados de superficie.
Así lo anunció ayer el jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Burgos, Javier María García López, durante la presentación del libro y la exposición ‘Sierra de Atapuerca. Una mirada botánica’. La muestra, que acoge desde hoy el Aula de Medio Ambiente de Fundación Caja de Burgos, fue producida en el marco de la colaboración que mantienen las fundaciones Atapuerca y Caja de Burgos, y está formada por 24 paneles en los que se muestran las especies más representativas de la flora de la sierra burgalesa a través de fotografías descriptivas.
Se trata del resultado de los trabajos realizados de 2020 a 2024 para la realización del Catálogo Florístico de la sierra de Atapuerca y de un libro que recoge en fotografías detalladas más de trescientas especies de plantas vasculares de las más de seiscientas que se han localizado en este ámbito geográfico en la actualidad.
En este sentido, el también autor de la publicación detalló que esta planta blanca de unos dos centímetros es «la más valiosa» de toda la Sierra e insistió en la importancia de que sea una especie protegida en el Catálogo de plantas protegidas de Castilla y León, que -dijo- «nos enlaza con el tema cultural de la Sierra». «Dicha planta ha seguido los movimientos trashumantes del ganado; esa planta es el ganado el que cuando pasa su semilla por el tracto digestivo consigue que germine.
Asimismo, García detalló que esta planta es de las primeras que florecen la Sierra de Atapuerca y que lo hace a mediados de marzo en «muy poquitos sitios debajo de algunas encinas». «De repente es como un escarcha, es como si hubiese nevado y se convierte en una pequeña alfombra blanca», apostilló, al tiempo que aplaudió que «son esos valores bonitos ocultos de la Sierra que hemos querido con esta exposición aflorar».
Asimismo, destacó que de las aproximadamente 2.500 especies de plantas que actualmente están inventariadas en la provincia de Burgos, se han localizado durante las campañas de los años 2020 a 2024 unas 600 especies en las 2.250 hectáreas del área cubierta. Ello significa, dijo, que u territorio de apenas un 0,15 por ciento de la superficie provincial alberga una cuarta parte de la riqueza florística de la provincia, informa Ical.
En el acto de inauguración también asistió el presidente de la Fundación Atapuerca, Antonio Méndez Pozo; su vicepresidente y codirector de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, Eudald Carbonell; así como el director de las Aulas de Medio Ambiente de la Fundación Caja de Burgos, Miguel Ángel Pinto
La muestra está producida en el marco de la colaboración que mantienen la Fundación Atapuerca y la Fundación Caja de Burgos y coincide además con la celebración del 25 aniversario de la Fundación Atapuerca y el 20 aniversario de la creación de las Aulas de Medio Ambiente. Se trata del resultado de los trabajos realizados entre 2020 y 2024 para elaborar el catálogo florístico de la sierra de Atapuerca, el primero que se realiza de dicho territorio, que ha quedado recogido en un libro, titulado igual que la exposición, que será presentado en sociedad en Cultural Cordón a finales de noviembre.