El paquete fiscal afronta una jornada decisiva en el Congreso con el PSOE buscando el equilibrio entre sus socios
Junts rechaza reeditar el impuesto a las energéticas que exigen ERC y Bildu, y el PNV no acepta la idea de Sumar de gravar la sanidad privada
MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) –
La Comisión de Hacienda del Congreso votará este jueves el paquete fiscal que el Gobierno busca añadir al impuesto a empresas multinacionales acordado en la UE, y el PSOE busca un punto de equilibrio ante la división de posiciones dentro del bloque de investidura.
Se trata del proyecto de ley que inicialmente transpone una directiva europea para crear un nuevo impuesto mínimo global del 15% a empresas multinacionales, pero en el que el PSOE y Sumar han pactado incorporar una reforma fiscal con nuevos impuestos y revisando parte de los existentes. Y es que es la última oportunidad de acometer una amplia reforma fiscal, dado que no se pueden aprobar impuestos por decreto ley y que los Presupuestos de 2025 tienen un futuro incierto.
Así, los planes de Hacienda pasan por crear nuevos impuestos a vapeadores, el tabaco, eliminar la bonificación del diésel, un nuevo diseño del gravamen a la banca y que se dé por amortizado el que se aplica a las energéticas.
Pero en este punto hay división en el bloque. Por un lado, Junts pactó con el PSOE dejar morir el impuesto energético para no poner en riesgo inversiones en Tarragona, y por otro, ERC, Bildu y Podemos insisten en hacer permanente el impuesto al sector energético ante los beneficios récord de compañías como Iberdrola. Del mismo modo, Sumar aboga por quitar exenciones fiscales a seguros médicos, algo que rechaza de plano el PNV, al ser algo muy extendido entre trabajadores de Euskadi.
De hecho, la comisión se iba a celebrar el pasado lunes, pero el panorama de división provocó que se desconvocara la reunión y que el Ejecutivo decidiera vetar enmiendas a la ley por la posibilidad de que se aprobaran en contra de su criterio, como rebajar el IVA a las peluquerías o a los productos de higiene íntima femenina.
Por medio, PSOE y Sumar anunciaron su pacto fiscal, que incluye otras medidas como aplicar un IVA del 21% a los apartamentos turísticos, elevar los impuestos de las Socimis y endurecer la fiscalidad de yates, aviones privados y coches de lujo.
DE MOMENTO SOLO SE RECOGEN ASPECTOS TÉCNICOS
De momento, el proyecto sólo ha superado la fase de ponencia, en una reunión a puerta cerrada, y únicamente se han incorporado cuatro enmiendas técnicas del PSOE relacionadas con el nuevo impuesto mínimo global, sin entrar en cuestiones como el tributo a la banca y las energéticas.
Ante las diferencias entre socios, el PNV no descarta precisamente que el texto que se apruebe en comisión precisamente sólo incorpore finalmente cuestiones relativas al impuesto mínimo global para conseguir que prospere la tramitación parlamentaria. «Es lo más sencillo», ha dicho el portavoz del partido en el Congreso, Aitor Esteban.
Con su paquete fiscal, el PSOE quiere entre otros asuntos subir la fiscalidad al tabaco, gravar a los vapeadores, reformar el Impuesto de Sociedades o subir las rentas del capital.
También eliminar, a partir del 1 de abril de 2025, la bonificación que tenía el diésel frente a la gasolina, aunque sin afectar al gasóleo profesional. La idea es introducir un mecanismo para rebajar la tributación que se activará si durante dos meses consecutivos la media del precio del diésel supera los dos euros por litro y la media de cotización del barril de Brent se incrementa ese segundo mes por encima de la media del mes anterior.
Asimismo, hay enmiendas socialistas que se debatirán el lunes para exigir el pago anticipado del IVA de los hidrocarburos y así luchar contra el fraude que los ‘missing traders’ realizan en la importación de este producto.
IMPUESTO DE SOCIEDADES
El PSOE también busca una reforma del Impuesto de Sociedades para contrarrestar la sentencia del Tribunal Constitucional que declaró la nulidad parcial de una reforma sobre este tributo que ejecutó el exministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
Así, se establece de nuevo un límite a las grandes empresas o grupos empresariales para aplicar deducciones para compensar las bases imponibles negativas. El límite es del 50% por ejercicio para las empresas con una cifra de negocio entre los 20 millones y los 60 millones de euros y del 25% para aquellas que superaran los 60 millones.
En otra enmienda del PSOE, que Junts dice que se ha negociado con ellos, se propone rebajar de manera progresiva este impuesto a empresas cuyo importe neto de la cifra de negocios sea inferior a un millón de euros. Frente al 23% que se grava a estas empresas en la actualidad, el Grupo Socialista propone rebajar el impuesto para que la parte de base imponible comprendida hasta los 50.000 euros se grave a un tipo del 17% en 2027, y la restante al 20% en 2029.
A esto se suma otra enmienda para que las compañías puedan deducirse hasta un 20% del importe neto del incremento de sus fondos propios, frente al 15% actual, con la idea potenciar la capitalización empresarial mediante el incremento del patrimonio neto.
ENMIENDA A LA INCAPACIDAD PERMANENTE Y LAS RENTAS DEL CAPITAL
A su vez, se analizarán enmiendas para que la pensión por incapacidad permanente absoluta o de gran invalidez sea compatible con un trabajo que requiera estar inscrito en algún régimen de la Seguridad Social.
El Grupo Socialista también introduce enmiendas para incrementar en un punto la tributación de las rentas del capital superiores a 300.000 euros, pasando del 28% al 29%.
La última medida fiscal a destacar es el compromiso de impulsar en la UE la modificación de la Directiva del IVA, con el objeto de gravar este impuesto a las plataformas de arrendamientos de vivienda turística, como Airbnb, en zonas donde la abundancia de estos alojamientos dificulta el acceso a una vivienda o en zonas saturadas. Es el llamado paquete ViDA (VAT in the Digital Age), que el Gobierno considera «una prioridad».