El New Zealand reacciona a lo campeón y está a un punto de ganar la America’s Cup
Los neozelandeses, defensores del título, están 6-2 y ponen contra las cuerdas al INEOS Britannia
BARCELONA, 18 Oct. (EUROPA PRESS) –
El Emirates Team New Zealand ha ganado este viernes las dos regatas de la Louis Vuitton 37ª America’s Cup Match al INEOS Britannia y esta gran final de la Copa del América de Barcelona está ya cerca de terminar, con los defensores del título a un único punto de reconquistar la Jarra de las Cien Guineas y, los británicos, pese a situarse 4-2 el miércoles, están ya sin margen de error.
La 37ª Copa del América podría quedar decidida este mismo sábado ya que el Emirates Team New Zealand, el ‘Defender’ de la competición deportiva más antigua, está a una sola victoria de llegar a las 7 que son necesarias para levantar el prestigioso trofeo. Pero el INEOS Britannia, igual que reaccionó el miércoles, buscará hacerlo este sábado.
Del 4-0 inicial se pasó al 4-2 y, este viernes, las aguas volvieron al cauce pensado y planeado por los ‘kiwis’, ahora de nuevo con cuatro puntos de margen (6-2). Tras las dos victorias del otro día para el INEOS Britannia, el Emirates Team New Zealand tiró de orgullo y, quizá ‘picado’ por lo sucedido en la anterior jornada, marcaron territorio con dos victorias incontestables.
No hubo duelo, no hubo pugna, no hubo emoción más allá de dos salidas bastante igualadas. Pero, ya con las dos regatas vivas y con un viento más flojo y procedente de la ciudad de Barcelona, un mar más manso y propicio para el equipo neozelandés, el ‘Taihoro’ voló más fino que nunca para, con dos auténticas exhibiciones, poner a los de Grant Dalton, el gran jefe de este tinglado multimillonario, a tiro de triunfo.
Y es que el ‘Challenger of Record’ que es el ‘Britannia II’ de los ingleses no pudo esta vez oponer resitencia. Deberán mejorar y mucho los de Sir Ben Ainslie para seguir vivos. Pero, atención, la mayor remontada histórica en la Copa del América y quizá en todo el deporte la protagonizó el Oracle, en la edición de San Francisco 2013, ante los neozelandeses y con Ainslie trabajando entonces con los estadounidenses. Del 8-1 para los ‘kiwis’ se pasó al 8-9 final con ocho triunfos seguidos del barco donde ‘mandaba’ Ainslie.
Pero, más allá de recuerdos del pasado que puedan motivar a unos y otros, el Emirates Team New Zealand entró y salió mejor este viernes a las aguas de Barcelona. Cogieron la iniciativa, aceptaron el reto del INEOS Britannia y no dieron lugar a la sorpresa o a la continuación de la remontada. Dos victorias, 6-2 en el marcador del America’s Cup Match y a un único triunfo de volver a levantar al cielo de Barcelona (¿habrá nueva edición en tierras barcelonesas?) la Jarra de las Cien Guineas.
En la primera regata, bien pronto cogieron más de 100 metros de ventaja los ‘kiwis’, con Peter Burling y Nathan Outteridge como timoneles. Pero el barco británico supo sufrir y acercarse poco a poco hasta que, buscando el primer paso por boya, cedió de nuevo y cruzó con 12 segundos de desventaja, aumentando a 13 segundos tras el segundo paso, primero por la boya de barlovento.
Esta línea de regata se iba confirmando manga a manga y baliza a baliza. Los británicos, cada vez más cerca de los 500 metros perdidos, no encontraban la manera de recortar esa distancia. Todo lo contrario, con una navegación más brusca y algún desajuste en las viradas, veían escaparse a un Emirates Team New Zealand muy fino y seguro de sí mismo en un vuelo regular sobre un mar más calmado esta vez.
En la última manga el barco ‘kiwi’ tenía ya un kilómetro de ventaja sobre el ‘Britannia II’, una paliza en toda regla en una regata muy distinta a la última, en la anterior jornada, cuando en un ‘match race’ puro e igualado los de Sir Ben Ainslie sí pudieron competir y, de hecho, ganaron a los defensores para llegar hasta aquí con 4-2 abajo. Pero la respuesta de los neozelandeses fue contundente, tanto que no hubo discusión alguna sobre el 5-2 en este America’s Cup Match, con 1:13 minutos de ventaja para el ‘Taihoro’.
Y en la segunda regata ocurrió más de lo mismo. O mejor, para los ‘kiwis’, e incluso peor para los ingleses. Tras ese primer cara a cara, la lucha en la presalida de la segunda regata de la jornada se convertía en vital para el INEOS Britannia, pero esta vez Ainslie no pudo sacarse un as de la manga y no hubo fallo en la estrategia ‘kiwi’.
Además, nada más pasar la primera baliza, con ambos barcos navegando sobre el margen izquierdo del campo de regatas, el barco británico se hundió durante unos escasos segundos, con ambos ‘foils’ (alerones) hundidos en el agua, y la distancia creció hasta los 400 metros, dejando todo de cara de nuevo a un Team New Zealand que seguía sin cometer el más mínimo error. Y así fue hasta el final, hasta poner este 6-2 en el marcador que obliga al INEOS Britannia a repetir la hazaña del Oracle en 2013, algo que sin duda intentarán evitar los neozelandeses.