El enviado de paz de la ONU denuncia el «conmensurable trauma y dolor» tras más de un año de guerra en Gaza

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MADRID 19 Nov. (EUROPA PRESS) –

El enviado de paz de Naciones Unidas para Oriente Próximo, Tor Wennesland, ha denunciado este lunes «el trauma y el dolor inconmensurables» desatados después de más de un año de ofensiva israelí en la Franja de Gaza por los atentados del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre, y la consiguiente expansión del conflicto en Oriente Próximo.

«Después de más de un año de horrible guerra y derramamiento de sangre, la región se encuentra en una encrucijada sombría (…)Estamos viviendo una pesadilla. El trauma y el dolor que se han desatado es inconmensurable», ha declarado desde Nueva York, en la reunión informativa del Consejo de Seguridad sobre la situación en el Oriente Medio.

Wennesland ha lamentado que el conflicto entre el Ejército israelí y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) tras los atentados del grupo palestino el 7 de octubre de 2023 y la consiguiente ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza «se haya extendido a la región, involucrando a grupos armados no estatales».

«¿Cuánta más miseria se puede esperar que sufra la gente común de ambos lados? ¿Hasta qué punto podemos torcer el sistema de leyes e instituciones internacionales destinadas a proteger a los civiles inocentes? ¿Hasta qué punto podemos permitir que se socaven las instituciones palestinas, amenazando los mismos acuerdos destinados a garantizar una solución pacífica a este conflicto?», ha dicho ante los miembros del Consejo de Seguridad.

Wennesland ha reiterado la necesidad de que la comunidad internacional, junto con las partes, unan sus «esfuerzos diplomáticos» para dar una salida a la guerra «perpetua».

Para ello, ha declarado, «Gaza debe seguir siendo una parte integral de un futuro Estado palestino, sin reducciones en su territorio» ni presencia militar israelí. Asimismo, ha defendido que la Franja y Cisjordania estén «unificadas política, económica y administrativamente», con un gobierno reconocido por el pueblo palestino y la comunidad internacional.

Al mismo tiempo, ha pedido que se aborden «las preocupaciones legítimas de Israel en materia de seguridad», especialmente a partir de los ataques del 7 de octubre, si bien no ha especificado cómo.

Wennesland ha defendido una «respuesta colectiva» para afrontar la recuperación y reconstrucción de la Franja de Gaza, además de un «proceso político» que permita «avanzar de manera tangible hacia una solución de dos Estados y una paz duradera».

«Naciones Unidas sigue plenamente comprometida a participar y cooperar con este esfuerzo, y a hacer su parte para garantizar que esta horrible guerra no solo termine pronto, sino que concluya de una manera que garantice un futuro mejor para los palestinos, los israelíes y todos en la región», ha concluido.

Por otro lado, ha abordado la situación en Líbano al denunciar que, «como se temía, un año de intercambios armados a través de la Línea Azul entre Israel y (el partido-milicia chií libanés) Hezbolá ha estallado en una guerra total». Asimismo, ha aprovechado la ocasión para recordar a todas las víctimas civiles del conflicto.