Duele, es gente que conoces, aquí somos todos medio familia
VILLAFRANCA DE EBRO (ZARAGOZA), 16 (EUROPA PRESS)
El día después de la tragedia vivida este viernes en Villafranca de Ebro (Zaragoza), donde un incendio en la residencia de mayores Jardines de Villafranca dejó diez fallecidos y dos personas heridas, la localidad encaja el golpe sumida todavía en la conmoción: «Duele, es gente que conoces porque aquí todos somos medio familia», expone a Europa Press la alcaldesa del municipio, Volga Ramírez, que sigue dando vueltas a las escenas del drama vivido en la residencia tras haber dormido «algo» durante la pasada noche.
«Ayer, como estuve de aquí para allá, pues tampoco te enteras mucho, pero la cabeza es muy mala y ahora estás dándole vueltas a todo. Porque, a ver, es gente que conoces y duele», reconoce.
En ese repaso machacón que hace forzada por su cerebro como reacción al ‘shock’ vivido, Volga no es capaz de recordar algunos de los momentos vividos en primera fila: «Es que no sé cómo lo he hecho. Te lo juro, ¿eh? Que no lo sé. Porque me dicen cosas que sucedieron que yo ni me acuerdo, pero, a ver, porque soy como soy, y tiras pa’lante. Y nada más».
Ella y su marido fueron de los primeros en acudir a socorrer a los residentes en un momento de gran tensión, con la residencia envuelta en una densa nube de humo: «Mi marido está bien, pero en ese momento, la segunda vez que entró –guiado por las trabajadoras–, lo primero que pensé, ¡que aún no ha cobrado el primer mes de jubilación! Te lo juro, eh, dije, jolín, acaba de jubilarse el pobre y ya empezamos. Pero bueno, había que hacerlo, somos humanos. Y hay que tirar pa’lante, no hay más», insiste.
Villafranca de Ebro, reconoce Ramírez, «está muy afectado, porque no es lo mismo una tragedia así en un lugar pequeño como éste, en el que todos nos conocemos, que somos todos medio familia. Cambia completamente». Alude la alcaldesa a la «estrecha relación» que los vecinos mantienen con la residencia, tanto con los trabajadores como con los residentes.
«Los conoces y convives con ellos. Es que, a ver, llega Reyes y vamos allí, son unos más en el pueblo. Y en la residencia hay chicas de Villafranca que trabajan allí, otras vienen de Fuentes, de Pastriz, de varios pueblos acuden allí a trabajar. Y los residentes acuden a la biblioteca, a los cursos que se hacen, a tomar café, a todo», explica Ramírez.
Es el caso de Fernando: «Todas las mañanas voy al Ayuntamiento y lo veo, ‘¿qué tal, Volga? Bien, bien’ y ayer pues claro, cuando lo vi, pues me eché a llorar, normal. Estás todos los días con él», comparte.
La propia alcaldesa se encargó de aliviar la angustia de varios familiares que en un primer momento no sabían si sus seres queridos se encontraban entre la decena de víctimas. «Hay familias y personas que sí conoces, otras no porque son las que no salen nunca, pero por ejemplo, hay una señora del pueblo, Pilar, que es vecina mía de toda la vida, y que no se puede ni menear. Pues enseguida fue ‘¡Pilar, Pilar, Pilar, que no la veo, Pilar!’ Y ya cuando la vi me quedé un poco más tranquila», rememora.
La alcaldesa también estuvo este viernes en el punto de atención a las familias, para las que sólo tiene palabras de admiración: «Vinieron enseguida y su comportamiento fue excepcional, de verdad. Les dimos el pésame, muchas de ellas me conocen», explica.
Ese apego con los residentes lleva a la corporación a realizar este sábado una visita a los residentes desplazados a la residencia de Valentia Huesca. «Hoy el Ayuntamiento vamos a Huesca a verlos, estaremos un ratito allí a ver cómo se encuentran después de lo ocurrido», comenta.
La localidad zaragozana fue este viernes foco de la tragedia, de las primeras escenas de pánico, de dolor por los fallecidos y sus familiares y alivio por aquellos residentes y trabajadoras que lograron salir de la residencia con vida. «Nos han llegado muestras de pésame de toda España, hasta de Nueva York, de Filadelfia, que tengo yo familia, que no sé ni cómo se han enterado. De todo, yo tengo mucha familia en Valencia, en Almansa (Albacete) y todo el mundo te pregunta ‘pero, ¿qué ha pasado?’ Hasta que no nos lo digan, no lo sabemos», apunta.
En ese sentido, prosigue la investigación de la Guardia Civil con el apoyo de un equipo especializado en la investigación de incendios llegado de Logroño para esclarecer la causa concreta del incendio. «Ya no nos han dejado entrar, no dejan entrar a nadie. A mí tampoco. No podemos ni pasar por la calle», explica la alcaldesa.
En cuanto a las dos personas heridas, una de ellas permanece hospitalizada en planta en el Royo Villanova, mientras que la otra sigue ingresada en la UCI y continúa estable, en estado grave.