cómo se usa y por qué es la mejor opción para renovar muebles y paredes

Y para ello, la última tendencia: ‘chalk paint’ o pintura a la tiza. Se trata de una pintura natural, no tóxica y fácil de aplicar. Ofrece un acabado envejecido fantástico y (lo mejor de todo), es económica. Además, no necesitado lijado previo ni imprimación posterior, lo que hará que tus muebles presenten un aspecto envejecido desde el primer momento.

Lo mejor de la pintura a la tiza

-¿Dónde pintar mis muebles? Sin duda alguna, lo mejor de la ‘chalk paint’ es el efecto que imprime a los muebles, con un acabado mate y empolvado. Además, no contiene disolvente, por lo que si te animas a pintar con pintura a la tiza no necesitarás tener la ventana cerrada o sacar los muebles al exterior ya que no desprende olor.

-Amplia gama de colorido. El abanico de colores en el mundo de la pintura es prácticamente infinito. Y la pintura a la tiza no iba a ser menos. La gran variedad de tonos, sobre todo los pasteles, hará las delicias de cualquier mueble al que decidas darle una segunda vida. Apuesta por el verde ‘mint’, coral pastel o rosa. Tus muebles llamarán la atención.

-Brocha o spray. Si no eres un experto en pintura lo que te resultará más sencillo es aplicar la pintura de tiza con brocha o pincel. Pero la ‘chalk paint’ también se presenta en su versión spray. Si te decides por esta modalidad, recuerda tapar con plásticos y cinta de carrocero todo lo que quede alrededor del mueble que vas a pintar.

-Sin lijar ni dejar secar. La pintura de tiza es espesa y cubriente, por lo que ni te será necesario lijar la superficie previamente ni tampoco aplicar más de dos capas. Los resultados aparecerán desde casi el primer momento y el secado es de lo más rápido.

-Muebles, paredes y mucho más. Cabe destacar que otra de las ventajas de la pintura a la tiza es que fija en casi todas las superficies: paredes interiores y exteriores, azulejos… Incluso sirve para pintar ladrillo, piedra o escayola. Solo tienes que elegir el tipo de pintura a la tiza adecuado. Y es que si bien es cierto que la ‘chalk paint’ no necesita imprimación, en algunos materiales como la melanina, sí será necesario aplicar un producto para conseguir un mejor fijado.

¿Cómo lograr el efecto envejecido en un mueble?

Si tienes pensado lanzarte a darle un lavado de cara a ese mueble que ya te tiene aburrida en casa es importante tener en cuenta los siguientes consejos. Así conseguirás el efecto envejecido que está tan de moda.

-Aplica pintura que contraste con la base del mueble que has decidido pintar. Por ejemplo, si es verde oscuro decídete por un tono blanco envejecido.

-Cuando este color se haya secado, repite el mismo proceso con el mismo color pero en un tono más claro.

-Llegó el momento de lijar. Con una lija fina o un estropajo de aluminio comienza a frotar en las zonas que tienen más desgaste: esquinas, zona de tiradores en caso de que tenga cajones, laterales…

-Deja secar el tiempo que indique el fabricante y recuerda, es importante cerrar bien los botes de pintura ya que cuando pintamos con ‘chalk paint’ es habitual que los muebles necesiten alguna capa posteriormente. Su desgaste es mayor que la pintura esmaltada.