Ayuntamiento de Valladolid coordinará tareas de poda para mejorar la limpieza

García Pellitero asegura que la recogida de las hojas caídas no se puede hacer de manera diaria «en todas las zonas»

VALLADOLID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) –

Las concejalías de Medio Ambiente y Salud Pública y Seguridad Ciudadana han concretado un protocolo interno de colaboración, que comienza a funcionar este otoño, para coordinar mejor las tareas de poda de árboles y de recogida de hojas caída, con lo que el equipo de Gobierno confía en lograr una actuación de limpieza más eficaz y eficiente que en años anteriores.

El concejal de Medio Ambiente, Alejandro García Pellitero, y el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Cuadrado Toquero, han informado este miércoles de la campaña de poda y recogida de hojas que se ha puesto en marcha estos días y que ambas áreas municipales llevan a cabo de manera conjunta y coordinada.

Para ello han acompañado a un equipo mixto compuesto por personal del Servicio de Parques y Jardines y personal del Servicio de Limpieza, que se encargan de este tipo de trabajos, y han querido destacar la importancia de que ambas labores se desarrollen de manera coordinada, lo que se traduce en una actuación «ordenada, más eficaz y eficiente para el conjunto de la ciudad», como ha señalado García Pellitero.

En el mismo sentido se ha pronunciado Alberto Cuadrado, quien ha explicado que «de esta forma, los esfuerzos de ambos servicios se ven reforzados en base a la coordinación de todos los equipos», ha señalado, antes de recalcar que no se puede «difuminar los esfuerzos de uno y otro servicio» como considera que sucedía «tiempo atrás».

Los equipos técnicos de ambos servicios, que según matizan fuentes municipales, «ya venían realizando sus trabajos colaborando entre ellos», han establecido un protocolo en el que se delimitan las labores de cada servicio, las que le corresponde acometer a cada uno de ellos, y se han identificado también aquellas labores que requieren de una actuación conjunta.

Además, se han puesto de manifiesto los canales de comunicación apropiados para estar en constante contacto y se ha determinado una periodicidad para mantener reuniones de planificación, de manera que el protocolo sea un elemento «vivo».

Como han resumido los concejales del equipo de Gobierno, la clave es la coordinación para que no suceda como en ocasiones en las que «un día se recogían las hojas en una calle y al día siguiente pasaba un equipo de poda», lo que suponía que la vía volviera a quedar salpicada de hojas y restos vegetales.

Como ha subrayado el concejal de Medio Ambiente, «para la planificación y realización de las podas, la ciudad queda dividida en los sectores norte, sur y centro, cuyas tareas se ejecutarán mediante contratos externos con empresas que llevan el mantenimiento de todos los parques y jardines; y en el denominado sector ‘municipal’ del que se encarga directamente personal municipal y que abarca espacios como los jardines de La Rosaleda y Moreras, Parquesol, Campo Grande, y una zona de Huerta del Rey.

Cada uno de los equipos que trabajará en cada zona tiene confeccionado un plan de podas que establece la planificación espacial y temporal de la poda, especificando tanto las calles como el momento en el que se realizará la misma».

EQUIPOS DE PODA.

Para materializar dichos planes de poda, se dispone de un equipo por zona compuesto por una media de Cinco oficiales podadores, un conductor de camión, una plataforma elevadora, un peón de limpieza y un oficial para la recogida de ramas y restos vegetales y en determinados sectores se dispone de trituradora para minimizar el volumen retirado.

Además, el concejal Alberto Cuadrado ha añadido que cada vez que trabaje uno de estos equipos «aparecerá una barredora».

En consecuencia, el total de personal y medios implicados en la campaña estaría compuesto por 32 personas, cuatro camiones y cuatro plataformas. Además, se han dispuesto de distintos contenedores repartidos por los sectores para la recogida de restos.

La estimación es que por cada temporada se recogen unas 1.600 toneladas, con el matiz de que dicho dato es muy inferior en cuanto a volumen al de temporadas anteriores, al realizarse la trituración y compostaje de los restos.

El criterio general de poda establecido en el Plan Director del Arbolado de Valladolid es el de mantener el crecimiento libre del arbolado para que así proporcionen el máximo de beneficios ecosistémicos.

RECOGIDA DE HOJAS.

En lo que se refiere a la recogida de hojas, el despliegue de medios humanos y mecánicos consiste en aplicar un sistema de limpieza mixta, con el que cada día, de lunes a viernes, se asigna una máquina barredora a cada una de las seis zonas de limpieza viaria, además de un peón de Parques y Jardines equipado con máquina sopladora y/o cepillo de barrido.

Ocasionalmente, y como actuaciones puntuales, se destinan equipos itinerantes de trabajo para la retirada masiva de hoja en zonas periféricas de la capital.

Además, son destinadas entre dos y tres barredoras diarias de lunes a viernes en el turno de tarde.

«Dado el volumen de hoja recogido, que hace que las máquinas barredoras tengan que efectuar entre tres y cinco descargas por jornada de trabajo, el Servicio ha contratado la colocación y descarga de contenedores de obra, situando un total de 10 unidades repartidas en determinados depósitos de los seis sectores de limpieza viaria en los que está dividida la ciudad a efectos de limpieza. Esto se hace así para evitar largos y costosos desplazamientos de las máquinas barredoras», ha especificado el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana.

Además, se mantienen, aunque con un mayor número de descargas, los cuatro contenedores contratados y colocados de forma permanente en el Parque Central del Servicio Municipal de Limpieza.

El volumen de hoja recogido durante toda la campaña por parte de las barredoras se aproxima a las 1.400 toneladas, a lo que se suma el volumen acumulado por los carritos de limpieza, sobre el que no se registra cantidad.

Con todo ello el equipo de Gobierno confía en que «el problema de las hojas» se vea reducido, aunque García Pellitero ha querido matizar que la frecuencia de limpieza «no es diaria en todas las zonas» pese a que «los vecinos entienden que las hojas pues prácticamente habría que recogerlas día a día», algo que resulta «muy difícil» porque reconoce que el Ayuntamiento carece de «medios y recursos suficientes».

En cualquier caso, ha explicado que las tareas se tratan de organizar para que las zonas de mayor tránsito de peatones sean las que estén limpias pues desde primera hora de la mañana mientras que en otras se tratará de hacer con mayor frecuencia que en años anteriores.

PODA Y RECOGIDA SIMULTÁNEA.

En ciertas zonas, se realizan de manera simultánea las podas y la recogida de hoja, de manera que tras la poda y una vez agrupadas las ramas por parte del Servicio de Parques y Jardines, pasa una barredora del Servicio de Limpieza para rematar la retirada de hojas que hayan podido quedar.

En otras ocasiones, se realiza de manera simultánea la recogida de hojas de las zonas ajardinadas y de las calles adyacentes, consiguiendo una limpieza integral de la zona.