La Cumbre del Mediterráneo se reúne en Barcelona con la vista puesta en Oriente Próximo y la migración
El Foro Regional de la Unión por el Mediterráneo reúne este lunes en Barcelona a 43 países en un encuentro co-presidido por el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, y el ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi.
También participa en el encuentro el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, que dialogará con sus homólogos sobre la situación en Oriente Próximo, sobre inmigración y cooperación euro-mediterránea.
Tras la reunión planificada este lunes para las 13.00 horas (española) se ofrecerá una rueda de prensa conjunta con Borrell, Safadi, y el Secretario General de la Unión por el Mediterráneo, Nasser Kamel.
Borrell y Albares insisten en pedir el alto el fuego en Gaza y Líbano
Antes del arranque de la cumbre, Josep Borrell ha recalcado: «mi preocupación se centra lo que pasa [en Líbano] y en Gaza, donde se está viviendo la crisis humanitaria más aguda, más grave desde el final de la Segunda Guerra Mundial, con decenas de personas que pueden morir en las próximas semanas».
«Lo que está pasando en Oriente Medio indica que hemos perdido el sentimiento de humanidad», ha denunciado el líder de la diplomacia europea, que ha lamentado que «la comunidad internacional carece de la voluntad política o los instrumentos» para hacer que se acabe esta crisis.
En este sentido, Borrell ha recordado que depende de la voluntad de los diferentes países poner fin a este conflicto, al igual que decidir si continúan apoyando militarmente o no a Israel, como ya han declinado hacer España o Francia.
Por su parte, Albares ha advertido que «el derecho internacional y el derecho internacional humanitario tienen que respetarse en todos los países y en todos los momentos, también por Israel».
España «va a seguir trabajando y poniendo ideas encima de la mesa para el alto el fuego permanente«, ha insistido el ministro.
Precisamente este lunes, como primera cita de la jornada, Albares se ha reunido con su homólogo libanés, Abdallah Bou Habib.
España y Líbano han instado, en un comunicado conjunto, a un alto el fuego permanente e inmediato en Líbano que permita aplicar íntegramente la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Albares rechaza el ‘modelo Meloni’ de inmigración
En relación al debate sobre política migratoria, Albares ha rechazado el ‘modelo Meloni’ sobre inmigración y ha subrayado que «todas las personas tienen derecho a su dignidad».
«El derecho de asilo está en el ADNI europeo», ha recordado el ministro, que también ha denunciado que hay personas que «de manera legítima pero errónea» tienen que recurrir a las mafias que «trafican con seres humanos» y acaban encontrando «su tumba en el Mediterráneo y el Atlántico».
En este sentido, «España tiene una política migratoria muy clara», ha sentenciado Albares, que ha recordado que esta se basa en tres pilares: «el diálogo con los países de origen y tránsito (como Senegal, Mauritania o Marruecos), la cooperación económica y la lucha contra las mafias».
También Borrell se ha pronunciado sobre el acuerdo migratorio alcanzado por los líderes europeos, que, «no satisface a casi nadie», pero, según ha dicho, al menos se cuenta con «un común denominador».
Sobre este acuerdo que, según ha explicado el líder de la diplomacia europea, «se venía discutiendo hace años», Borrell ha recordado que existe «una tendencia hacia el offshoring [externalización de fronteras]» protagonizada por algunos países como Italia y frente a los que otros como España se posicionan en contra.
El vicepresidente de la UE ha explicado que la propuesta de Meloni de enviar fuera de las fronteras europeas a los demandantes de asilo mientras se estudia su solicitud, y que replica modelos como el británico, ya se ha puesto en entredicho por parte de los tribunales italianos, que han advertido a la primera ministra del país que no está de acuerdo con la legislación nacional.
Ahora esta medida «provoca una discusión» dentro de la Unión Europea, ha analizado Borrell, que ha anunciado que habrá que analizar si estas políticas de externalización «están de acuerdo o no con nuestras normas» (en referencia a las europeas).