Más de un centenar de incendios siguen activos en Portugal
Más de un centenar de incendios continúan activos en Portugal. En solo tres días, los fuegos han devastado gran parte de las regiones del centro y norte, convirtiendo a 2024 en el cuarto peor año de la última década en términos de hectáreas arrasadas por las llamas.
Ante la gravedad, el gobierno portugués ha declarado la situación de alerta hasta el final del jueves y ha asegurado que decretarán el estado de calamidad en los municipios afectados para poder apoyar más rápidamente a los perjudicados.
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Transcripción completa
En toda la región de Aveiro
siguen luchando sin tregua
contra el fuego.
Los incendios se extienden
por un perímetro aproximado
de 100 km.
Lo peor está en Mangual,
donde las llamas se acercan
peligrosamente a las casas.
Ya ha habido que desalojar
a decenas de vecinos.
Y esta es la imagen que vemos
en cualquier km a la redonda:
miles y miles de hectáreas quemadas.
Hay todavía 50 focos activos.
Oporto es la última ciudad
en sumarse al plan de emergencias.
Ha sido una noche larga, difícil.
Las llamas han devorado todo,
coches, casas.
Los vecinos lamentan
que se han visto muy solos.
Este sería un ejemplo:
coches totalmente carbonizados.
En Albergaria a Velha
muchos vecinos
han pasado la noche fuera.
«Estuvimos hasta las 3 de la mañana,
fuera de casa.
Las llamas se acercaban
por uno y otro lado»,
dice este vecino.
Las previsiones
siguen siendo complicadas
porque hay poca humedad
y mucho viento
y preocupa la rapidez
con la que se propagan las llamas.
Así que los esfuerzos están
en proteger a la población.
Hay muchos frentes activos,
sobre todo entre Aveiro y Oporto.
Así que el Gobierno
duplica esfuerzos:
20 hidroaviones y helicópteros
y 5000 efectivos
siguen combatiendo
el que se considera ya
como uno de los peores incendios
de las últimas décadas en Portugal.
Un total de 5.200 bomberos continúan luchando contra 117 incendios activos, con el distrito de Aveiro siendo el más afectado. En Águeda, la situación está «fuera de control», mientras que Sever do Vouga y Oliveira de Azeméis, donde se originó el fuego, son las zonas que requieren más recursos, según ha indicado el comandante nacional de la ANEPC, André Fernandes.
Los distritos vecinos de Viseu y Oporto también enfrentan momentos críticos, especialmente en localidades como Gondomar, donde más de 1.200 hectáreas han sido consumidas por las llamas, debido a la imposibilidad de los bomberos de acceder a ciertas áreas.
Asimismo, hay varias autopistas y carreteras nacionales cortadas y decenas de personas desalojadas por precaución. «La situación meteorológica se mantiene todavía bastante desfavorable«, ha afirmado el comandante, quien ha explicado que se encuentran «en una situación complicada» y se avecinan «horas muy complejas» ante estos incendios.
Efectivos de la UME se unen a las labores de extinción
Actualmente, operan en la región ocho aviones anfibio Canadair: cuatro franceses, dos españoles y dos italianos. A las que se sumarán en las próximas horas dos más procedentes de Marruecos, según ha añadido el comandante nacional de la ANEPC. Además, hay 270 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias de España.
Hasta el pasado domingo, la temporada de incendios en el Portugal continental hacía prever que el año transcurriría con relativa calma. Sin embargo, en tal solo tres días, las hectáreas consumidas pasaron de unas 18.600 a más de 90.000, según cifras del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales.
Pese a que las temperaturas están descendiendo y se prevén importantes precipitaciones para final de semana, Protección Civil ha señalado que se mantiene el riesgo elevado y extremo de incendio para las próximas 48 horas. «Todavía no podemos bajar los brazos, la situación sigue siendo complicada», ha añadido Fernandes.
Bajan a cinco los fallecidos
La Autoridad Nacional de Emergencia y Protección Civil (ANEPC) ha informado este miércoles de que son cinco los fallecidos por los incendios que asolan Portugal desde el domingo, dos menos que los notificados inicialmente. Mientras, los heridos ascienden a 118, 10 de ellos en estado grave.
Fernandes ha explicado que esta cifra actualizada proviene de datos oficiales que les ha facilitado el Instituto Nacional de Emergencia Médica. Por ello, han quedado fuera del recuento una persona que falleció en su vivienda y otra que murió en la vía pública, ambas de forma «súbita» y sin exposición directa a las llamas, que se expandieron en el país durante el fin de semana.