Yeo Siew Hua reflexiona sobre la cultura de la vigilancia en ‘Stranger eyes’
El singapuriense compite en la 69 Seminci con este filme a capas que avisa sobre el peso de las imágenes en la vida actual
VALLADOLID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) –
El cinesta singapuriense Yeo Siew Hua reflexiona sobre la cultura de la vigilancia de la densa Singapur en el thriller ‘Stranger eyes’, una propuesta construida en diferentes capas y que evoluciona hacia la complejidad de una sociedad desde el contexto de una pareja cuya hija ha desaparecido y está siendo grabada por un voyeurista.
La película participa en la Sección Oficial a concurso de la 69 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), a cuyo público invitará a tener diferentes interpretaciones de su propuesta inspirada en Singapur, «un Estado muy conocido por su vigilancia», según ha afirmado el director este lunes en una rueda de prensa.
‘Stranger eyes’ presenta en un inicio a Junyang (Wu Chien-Ho) y Peiying (Annica Panna), una joven pareja que busca a su pequeña hija Bo desde su desaparición hace tres meses en un parque. La rendición reina en su vida hasta que se dan cuenta de que alguien ha estado grabando su día a día.
La investigación sobre el voyeurista queda en manos del policía que también busca a la niña desaparecida, si bien la pareja, en el extremo por la situación y un pasado ya insatisfactorio, decide tomar cartas en el asunto.
A partir de ahí ‘Stranger eyes’ evoluciona, de una forma un tanto tediosa, hacia lo complejo en una trama que desvela e invita a interpretar sus diferentes capas, en las que se presenta al tercer protagonista, Wu (Lee Kang-Sheng), un hombre que vive con su madre y trabaja en una tienda de alimentos. Este comparte con los otros personajes una visible sensación de infelicidad.
En este contexto, la cinta, de más de dos horas de duración y que convirtió a Yeo Siew Hua en el primer cineasta de Singapur en competir en la Sección Oficial del Festival de Venecia, advierte de la tendencia a la continua observación del otro en una sociedad hipervigilada.
Y lo hace en un retrato de Singapur, con sus cámaras en las calles, sus altos edificios de apartamentos compactos y las ventanas que alumbran la vida que hay en ellos. Así, son numerosas las escenas de la cinta en la que se ve a los protagonistas a través de diferentes pantallas y dispositivos.
SINGAPUR, UN ESTADO VIGILANTE
En este sentido, el cineasta ha subrayado que la historia se inspira en el contexto en el que vive en Singapur, en un intento de «conectar» con su entorno, una «isla pequeñita pero con una población muy densa».
«Vemos estos bloques de apartamentos en los que abres las ventanas y ves a su vecino, tu vecino te ve a ti y conoces la rutina del uno de otro», ha detallado, para incidir en que se trata de una sociedad en la que «siempre estás viendo y siempre te están viendo».
Al respecto, ha advertido también del papel del Estado. «Sé que el Estado me vigila. Singapur es muy conocido por su vigilancia. Es algo que no olvidas», ha apostillado, para incidir en que ha compuesto una película que da lugar a «diferentes interpretaciones».
Eso ha buscado el director, quien se alzó con el Leopardo de Oro a la Mejor película en el Festival de Locarno por ‘Una tierra imaginada’ (2018), quien ha resaltado que ha optado por distintas capas, ángulos y perspectivas para conseguirlo.
Asimismo, ha precisado que la cinta interpela al espectador hasta el punto de hacer que se vea a sí mismo en lo que les sucede a los protagonistas, quienes, de alguna u otra forma, se han convertido en imágenes.
En este contexto, el cineasta ha advertido de la importancia de las imágenes para las personas en la actualidad. «Tiene un lugar prominente en nuestra existencia. Queremos que la gente se suscriba, nos siga y dé me gusta», ha avisado en una crítica también a las pantallas. «No tenemos en nuestra vida relaciones que no estén mediadas por las imágenes», ha insistido.
Por otro lado, ha defendido los silencios de la cinta que, ha dicho, podría haber sido «muda» y «seguir funcionando». En esta línea ha explicado también su atención por los espacios: «Lo que vemos desde un lugar apartado y lo que vemos de cerca es completamente diferente, quería jugar con eso».
YEO SIEW HUA
Estudió Filosofía en la Universidad Nacional de Singapur y es miembro fundador del colectivo cinematográfico 13 Little Pictures. Escribió y dirigió la película experimental ‘In the House of Straw’ (2009), elogiada por la crítica como un título fundamental de la Nueva Ola del cine de Singapur.
En 2015 participó en Talents Tokyo y concursó en el Autumn Meeting 2016, donde se hizo con el gran premio por el proyecto de su segunda obra de ficciín, ‘Una tierra imaginada’ (2018), que se alzó con el Leopardo de Oro a la mejor película en el Festival de Locarno, además de los galardones de los jurados joven y ecuménico, y de conquistar el premio a la mejor fotografía en Seminci.