Más de 500 personas marchan en Valladolid por el bloqueo negociador que asfixia a trabajadores

CSIF pide un acuerdo salarial que garantice salarios «dignos» ya que es «inadmisible» que en la región se cobre menos que en otras CCAA

   VALLADOLID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) –

   Más de 500 empleados públicos y de empresas privadas –según CSIF, sindicato convocante de la manifestación– se han movilizado este jueves en las calles de Valladolid para alertar del «bloqueo negociador» del Gobierno y la Junta que «castiga» a los trabajadores y «asfixia» los servicios públicos, lo que conduce a una «falta de inversión y estrangulamiento de los servicios públicos» en la región, unas consecuencias que «sufren toda la sociedad castellanoleonesas».

   La manifestación se ha iniciado a las puertas de la sede autonómica de CSIF, ha recorrido la céntrica calle de Santiago de la capital vallisoletana y ha concluido con la lectura de un manifiesto en la Plaza Mayor, con el que se ha reclamado un acuerdo salarial a nivel nacional que garantice «salarios dignos» y que la Administración regional avance en los complementos autonómicos para limar «el agravio comparativo» hacia unos empleados públicos que «son de los peores pagados de España», ya que «resulta inadmisible que en Castilla y León se continúe cobrando menos que en otras comunidades por el mismo trabajo».

   Bajo el lema ‘Sin presupuestos, sin negociación, sin derecho a un sueldo digno’, los manifestantes han respondido que «sobran las razones» para plantarse contra «la falta de voluntad política para sentarse a negociar en los foros que corresponden» y contra el «inmovilismo del Gobierno central y autonómico».

   El presidente de CSIF Castilla y León, Benjamín Castro, ha explicado que la organización ha salido este jueves a la calle para alertar de las condiciones «lamentables» de todos los trabajadores en la región, puesto que el sueldo medio está cuatro puntos por debajo de la media nacional y el salario moda roza el mínimo interprofesional «cuando muchas veces ni llega a él».

   La «precariedad» de las empresas privadas es «insoportable», ha lamentado Castro, quien ha puesto de manifiesto que en el ámbito de las empresas públicas se ve cómo el poder adquisitivo se recorta un 20 por ciento, mientras que en algunos ámbitos de las empresas privadas supera el 26 por ciento.

   Todo este «atasco» deja, según CSIF, en el ‘limbo’ la posibilidad de inyectar partidas económicas esenciales para reforzar las plantillas de los servicios públicos, para enmendar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores (del 20 por ciento en los empleados públicos y del 26 en los trabajadores de empresas privadas), para lograr la equiparación salarial entre administraciones y territorios y para generar políticas de generación económica y empleo.

   El máximo responsable autonómico de CSIF también ha enfatizado en que las jornadas laborales son «infumables», las familias «no pueden llegar a fin de mes» y los precios de la compra y la energía hacen la vida «insoportable».

   Por todo ello, Castro ha detallado que lo que se reivindica con esta movilización es la necesidad de contar con una negociación real en todos los ámbitos, que se convoquen las diferentes mesas generales de negociación en los tres niveles de administración y que la negociación colectiva se ponga en marcha para trabajar en conjunto.

   El presidente de CSIF Castilla y León se ha referido a determinadas reivindicaciones que ha calificado de «endémicas», tales como la equiparación salarial entre territorios y administraciones, el refuerzo de los servicios públicos, porque los ciudadanos «cada vez tienen un mayor detrimento en su calidad de vida y las plantillas están en cuadro». «Esto no puede seguir así», ha ahondado.

ELEVACIÓN SALARIAL

   No obstante, Benjamín Castro ha celebrado que la Administración regional haya tomado «cartas en el asunto» al señalar este miércoles el consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, que hay «margen de negociación para la elevación salarial de los más de 91.000 empleados públicos de la Junta».

   De hecho, el máximo responsable de CSIF en la región ha asegurado que «ya era hora» de que el Gobierno autonómico se diera cuenta de esta problemática que la organización ha denunciado desde hace «mucho tiempo» y es una de las razones fundamentales de la convocatoria de este jueves.

   «Pasemos de las musas al teatro, sentémonos en una mesa de negociación y pongamos el valor del trabajo de los miles de empleados públicos en Castilla y León que somos quienes desplegamos los servicios públicos esenciales», ha reflexionado Castro, quien también ha instado al Ejecutivo central a pactar un nuevo acuerdo salarial en el camino de la recuperación del poder adquisitivo.

   Además de la «urgente» equiparación salarial entre administraciones y territorios, Castro ha solicitado nuevas leyes de la Función Pública que sustituyan a las «obsoletas» de carácter nacional y autonómico, que se recupere la estructura salarial previa a 2010, que se acabe con las tasas de reposición, se negocien las ofertas de empleo público, se refuercen las plantillas para que dejen de estar «tensionadas y recargadas de tareas», se recuperen efectivos para así asegurar la prestación de los servicios y se implante la carrera profesional allí donde aún no se ha hecho, como es el caso de las cuatro universidades públicas de Castilla y León, muchos ayuntamientos y alguna diputación.

   Y que se haga todo ello «sin juegos de artificio y promesas huecas», ha puntualizado, al tiempo que ha pedido que se haga sin acuerdos que «rompen el mercado laboral» o sin conciertos que «rompen con el principio de solidaridad interterritorial e imposibilita la financiación de los servicios públicos, y con ello la igualdad entre territorios».