El compromiso con la excelencia del grupo agroalimentario MIGASA
El grupo agroalimentario MIGASA es una empresa familiar andaluza líder en producción y comercialización de aceites de oliva y aceites vegetales que ha conseguido ser la primera empresa agroalimentaria de Andalucía por volumen de facturación y el principal exportador de aceite de oliva de España.
Su fundador, Miguel Gallego Núñez, recogiendo la tradición familiar de comercio de aceites que se remonta a principios del pasado siglo, comenzó transportando y comercializando aceite de oliva.
Hoy, la empresa centra su actividad en el sector agroalimentario mediante la elaboración y comercialización de aceite de oliva, aceite de girasol, aceite de orujo de oliva, mayonesas, salsas, tomates, conservas vegetales, gazpacho, salmorejo, y todos los tipos de aceites vegetales y ácidos grasos derivados del aceite.
Desde sus inicios, MIGASA siempre ha estado muy unida al agricultor y al sector productor olivarero y ha buscado nuevas oportunidades de crecimiento, bien incorporando nuevas marcas a su entorno o poniendo en marcha alianzas estratégicas con otras empresas familiares o cooperativas de agricultores. El objetivo siempre ha sido diversificar y crecer para poder generar y desarrollar las oportunidades de un mercado cada vez más globalizado y competitivo en el que los aceites españoles son cada vez mejor valorados.
Para este grupo agroalimentario, es muy importante que las marcas que se incorporen a su entorno sigan manteniendo su esencia, su propio posicionamiento y las características que las hacen únicas y relevantes para sus mercados y consumidores. Respetando su autonomía, MIGASA las apoya y las refuerza en su camino, contribuyendo así a su crecimiento, aportando diversos recursos y estructuras. En su entorno de marcas y alianzas empresariales se encuentran Ybarra, La Masía, Musa, Mueloliva, Sandúa, Rafael Salgado, Aceite 1881, Monterreal, Vianeza, Aceites Mestral y Coimbra, entre otras.
Generar mayor valor
A lo largo de su recorrido, la estrategia de MIGASA ha estado dirigida a generar un mayor valor a todos los agentes que intervienen en la cadena de este negocio: desde los agricultores a los consumidores, pasando por sus clientes y distribuidores.
En este proceso, la compañía ha apostado por cuidar las materias primas y a las personas que las generan, más de 80.000 familias de agricultores, para generar un negocio sostenible en todos los sentidos: la propia rentabilidad de su trabajo y el cuidado del entorno que lo posibilita.
Para ello, hace más de 30 años MIGASA comenzó a buscar nuevos mercados que le permitieran crecer y generar ese valor. Actualmente es la principal compañía exportadora de aceites del mundo y prácticamente el 50% de su negocio está basado en mercados internacionales, estando presentes en más de 120 países de los cinco continentes.
El grupo agroalimentario andaluz de origen familiar MIGASA cuenta con más de 1.300 trabajadores, contribuyendo igualmente a la creación de cientos de puestos de trabajo indirectos, logrando un adecuado control de todas las fases del proceso, desde la selección y producción, hasta el envasado y la comercialización.
Desde sus orígenes la compañía mantiene el mismo espíritu competitivo y dinámico, sin perder sus señas de identidad como empresa familiar. Con la tercera generación ya incorporada y la profesionalización de la empresa, los valores de la compañía permanecen inalterables: el esfuerzo, el compromiso, la inversión en innovación y el trabajo en equipo.
El compromiso con sus consumidores, la ampliación de mercados y los altos estándares de calidad exigibles en la industria agroalimentaria nacional e internacional han motivado que, de manera intrínseca, la innovación constante y la incorporación al paradigma de la industria 4.0, se hayan convertido en parte indispensable de MIGASA. Así, esta empresa de origen familiar innova permanentemente para mejorar la calidad de sus productos, desde el enfoque de la contribución a la salud y bienestar de las personas y la adaptación a formas de producción más respetuosas con el medio ambiente.
Este compromiso con su entorno es el que le permitió en 2021 convertirse en la primera empresa del sector oleícola de España en obtener el sello de ‘Residuos a Recursos: Zero a vertedero’ en su centro de producción de Alcolea (Córdoba), que certifica que más de un 95% de los residuos se reintegran en la industria como materias primas secundarias evitando que acaben en vertederos.
También en este mismo centro de producción realizaría un proyecto innovador en materia de autoconsumo mediante una instalación fotovoltaica que permite que la fábrica sea más eficiente y reduzca de forma importante su huella de carbono, alcanzando un porcentaje de autoconsumo del 59,2%. Con esta iniciativa, en 25 años, MIGASA podrá evitar la emisión de 8.192 toneladas de CO2 a la atmósfera, lo que equivaldría a plantar 63.876 árboles y retirar 83.355 coches de la circulación. Este proyecto fue el primero en la hoja de ruta de la compañía en materia de autoconsumo y uso de energías limpias que está haciendo extensivo a otros centros de producción.
Asimismo, lanzó el sello ‘Olivar Tradicional’, mediante un acuerdo firmado junto a UPA y LIDL, para contribuir a poner en valor la tradición milenaria y sostenible de cultivo del olivar a la vez que garantiza un precio justo para los agricultores. A partir de este proyecto, participará en el Grupo Operativo AOVE Tradicional junto a la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), la empresa tecnológica Wealize, la Universidad de Jaén y LIDL para continuar trabajando en la puesta en valor del olivar tradicional para el consumidor final.
La compañía es además pionera en llevar a cabo actuaciones destinadas al fomento de la economía circular, como la puesta en marcha de la planta de destilación de ácidos grasos en Mengíbar (Jaén) a partir de los subproductos que generan los distintos aceites tratados por MIGASA.
Los ácidos grasos destilados se destinan a la alimentación animal como soporte graso de origen vegetal, en la industria farmacéutica y cosmética como soporte para la obtención de detergente, jabones y pomadas, y en la industria química como complemento a barnices, pinturas y polímeros. De esta forma, se cierra el círculo medioambiental del aceite de oliva, donde no se generan residuos.
Claves
Adaptación y mejora constantes
MIGASA es una empresa con un largo recorrido. La adaptación y mejora constantes son parte de sus valores y su aprendizaje: trabajar permanentemente en detectar las tendencias de consumo y adaptarse a las necesidades de los mercados, clientes y consumidores.
Excelencia en el producto
La empresa pone el foco en mejorar la calidad de los productos, desde el enfoque de la contribución a la salud y bienestar de las personas y la adaptación a formas de producción más respetuosas con el medio ambiente.
Puesta en valor del producto
Desde MIGASA se apuesta por dar visibilidad a esa excelencia de los productos, trasladando el valor al consumidor final, con estrategias de innovación como el desarrollo de nuevos formatos premium acompañados de una comunicación específica.
Compromiso con los agricultores y el campo
Los orígenes de la compañía como empresa familiar le han permitido tener una visión a largo plazo que les impulsa a trabajar en el presente para que las personas, el campo y el olivar tengan un futuro.